A sus 76 años, Julita López aprendió a leer y escribir

En Oaxaca, alrededor de 400 mil personas son analfabetas, por ello el estado tiene el tercer lugar nacional, con 13.3%: SEP

Foto: Edwin Hernández / EL UNIVERSAL
Especiales 03/10/2018 09:39 Lizbeth Flores Oaxaca de Juárez, Oaxaca Actualizada 09:46

[email protected]

¿Se imagina un día despertar y no poder distinguir ni una letra, ver palabras y no entender ni un mensaje en el celular; comenzar un viaje y no saber leer ni un letrero y, por añadidura, no poder contar su dinero; vivir, pero sin comprender lo que pasa a su alrededor? En Oaxaca unas 400 mil personas viven así: sin saber leer ni escribir.

Julita Ignacia López vivió sin conocer las letras ni los números por más de siete décadas, incluso, sin saber qué camión usar para transportarse, pero a sus 76 años decidió dejar de ser analfabeta y ahora estudia.

“Por un problema en la boca no quisieron atenderme los maestros, mis papás no me obligaron a ir a la escuela, y así fui creciendo”, relata Julita.

eh26092018055.jpg

Ella nació con labio leporino, lo que le dificulta poder comunicarse de forma clara con los demás. La pobreza y que sus padres también fueran analfabetas originaron que nunca fuera a la escuela.

Desde pequeña trabaja, hace tortillas  para vender y lava ropa ajena para obtener ingresos, así sostuvo a sus dos hijas, quienes ahora    han formado sus  familias.

Julita vive en la comunidad de San José, perteneciente al municipio de Santa María Atzompa.

eh26092018060.jpg

Sus días empiezan a las seis de la mañana, va al molino, trae la leña,  prepara las tortillas para vender, lava ropa, hace la comida y después de esta jornada,  a las nueve de la noche, saca su libro y empieza a estudiar.

Su rostro se ilumina cuando su mano derecha empieza a escribir su nombre y apellidos. “Me siento muy bien porque ya lo sé hacer”, expresa la mujer.

Desde hace cinco meses está siendo alfabetizada bajo el programa del Instituto Estatal de Educación para Adultos (IEEA), dependencia que desde hace siete años ha enseñado a leer y  escribir a unos 350 pobladores de Atzompa,  50 por año, detalla Carmen García, promotora del instituto.

eh26092018056.jpg

Derecho negado

En la plaza comunitaria del IEEA en Atzompa, la historia de Julita no es la única, está la de Josefina Méndez, de 63 años, y la de Florentina Gaspar, de 61 años.

Las tres mujeres  durante su niñez y juventud no tuvieron la oportunidad de estudiar,  ya sea por la pobreza o  porque sus padres se lo impidieron por ser mujeres.

eh26092018058.jpg

Josefina, ahora madre de familia, trabajó desde pequeña para que sus hermanos varones pudieran estudiar la primaria, a ella se le negó el derecho a la educación.

“Yo preguntaba que a dónde va el carro y el chofer me decía: ‘¿Qué no ve la letra? Es como si estuviéramos cieguitos; ahorita ya dependo de mí, siento muy bonito aprender”, destaca.

eh26092018070.jpg

En Oaxaca, hasta 2015 había un millón 384 mil 238 habitantes en rezago educativo, de esta población 371 mil 944 son analfabetas, mientras 427 mil 408 personas no concluyeron la primaria y 584 mil 886 no cuentan con la secundaria, de acuerdo con datos de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

Esto representa para Oaxaca  13.3%, por encima de la media nacional que es de 5.5%, por lo que el estado ocupa el tercer lugar  del país en analfabetismo, después de Chiapas (14.8) y Guerrero (13.6%).

eh26092018076.jpg

En la entidad, los principales sectores analfabetas son los adultos mayores de 60 años, después los jóvenes de entre 15 y 19 años, y  los menores de 10 a 14 años.

 

 

 

Comentarios