Alcaldes del Istmo van con proyectos de AMLO

Buscarán que las comunidades se manifiesten a favor de los planes del gobierno federal, a fin de promover el progreso en la región

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Especiales 15/01/2019 18:15 Alberto López Morales / Corresponsal Juchitán de Zaragoza, Oaxaca Actualizada 18:16

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Los alcaldes que pertenecen a Morena, y que desde el pasado 1 de enero gobiernan los municipios del Istmo de Tehuantepec, expresaron que contribuirán mediante el diálogo con las comunidades indígenas para que el plan transístmico, propuesto por el presidente Andrés Manuel López Obrador, sea una realidad antes de que concluya el sexenio.

El pasado 23 de diciembre,  López Obrador anunció que para desarrollar el plan transístmico su gobierno aplicará 8 mil millones de pesos este año para rehabilitar la línea ferroviaria de Salina Cruz, Oaxaca, a Coatzacoalcos, Veracruz; así como  las instalaciones portuarias de ambas ciudades. También prometió la construcción de un gasoducto, la introducción de una línea de fibra óptica en el corredor del Istmo y la declaración de zona libre en 35 municipios del sur  para el año 2021, una vez que estén concluidas las obras de infraestructura.

“Trabajaremos para sensibilizar a la ciudadanía sobre los beneficios de este  plan. Por ningún motivo vamos a permitir que dicho proyecto que apuesta al desarrollo de los pueblos istmeños encuentre obstáculos. No podemos ni debemos ser tontos para mostrar resistencias al progreso”, comentó el presidente municipal de Matías Romero, Alfredo Juárez Díaz, quien ganó la alcaldía con el registro de Morena.

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Matías Romero fue durante años uno de los enclaves del ferrocarril transístmico. Su vieja terminal de pasajeros, una locomotora de monumento en las inmediaciones del parque municipal, añejas y deterioradas viviendas tipo chalet inglés y el enorme patio que albergaba los talleres donde se reparaban las locomotoras recuerdan el pasado ferrocarril de esta ciudad.

Salina Cruz, Tehuantepec, Ciudad Ixtepec y  Matías Romero son municipios por donde pasa el tren transístmico de carga que reactivó sus operaciones desde el 7 de febrero del año pasado, y son  gobernados por Morena. Aunque no les toca el paso del ferrocarril, Juchitán y El Espinal también son municipios gobernados por el partido de López Obrador y se encuentran considerados dentro del corredor transístmico.

Aseguran que habrá diálogo

“Queremos que el proyecto transístmico del presidente López Obrador aterrice, porque  generará empleos y detonará el desarrollo del sur de Oaxaca. Como autoridades, vamos apostarle al diálogo con los comuneros para que conozcan todo el plan interoceánico y faciliten las inversiones, pero que también se respete el medio ambiente”, dijo Rogelio Cheng López, presidente municipal de Ciudad Ixtepec, donde confluyen el tren transístmico y el ferrocarril conocido como Panamericano, procedente de Arriaga, Chiapas.

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El presidente municipal de Juchitán, Emilio Montero Pérez, expresó que conociendo el contexto regional, seguro habrá resistencias al proyecto del Presidente, “pero vamos a generar toda la información para evitar los chantajes de quienes quieran obtener prebendas; impulsaremos la consulta, pero no permitiremos el chantaje. El plan de AMLO es viable y detonará el desarrollo del Istmo”.

Destacó que en breve “todos los presidentes municipales del Istmo de Tehuantepec  vamos a reunirnos con el encargado del proyecto transístmico y de la zona especial del gobierno federal, Rafael Marín Mollinedo, para empezar a trabajar conjuntamente a favor del desarrollo de la región”.

Añadió que en dicho  municipio  están en la mejor disposición de colaborar con el gobierno federal, sobre todo hablando con los campesinos para evitar complicaciones.

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El proyecto transístmico también impactará en localidades del municipio de San Juan Guichicovi, gobernado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), donde viven indígenas mixes. El alcalde perredista, Raynel Ramírez Mijangos, señaló que el plan de López Obrador  para aprovechar la estratégica ubicación geográfica del Istmo de Tehuantepec “conviene a todos porque detonará la economía”; sin embargo, indicó, se debe consultar a los campesinos que se rigen bajo la organización ejidal y comunal para que conozcan los impactos del proyecto.

Frente al optimismo de los alcaldes istmeños, el asesor de la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (Ucizoni), Carlos Beas Torres, pidió a los munícipes que construyan acuerdos para el verdadero desarrollo de la región, pues desde Coatzacoalcos, Veracruz, y hasta Salina Cruz, Oaxaca, hay problemas para el abasto del agua potable, los servicios de salud son deficientes, es precaria la oferta educativa y no hay un adecuado manejo de los desechos sólidos y de las aguas negras que desembocan en ríos y lagunas.

Para abril de este año, adelantó Carlos Beas Torres, la Ucizoni y las comunidades indígenas en resistencia frente a los megaproyectos convocarán a un foro por la defensa de la tierra del Istmo, “tal y como lo hicimos frente a ese mismo proyecto transístmico que quiso imponer el entonces presidente Ernesto Zedillo”.

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