A un año de los sismos, comerciantes se levantan en Juchitán
Preparan paquete económico de 100 mdp en créditos para mujeres y emprendedores afectados, asegura titular de BanOaxaca
Rumbo al centro de la ciudad, las personas a su paso leen la pregunta: “¿Buscas papelería?” El anuncio, impreso sobre una larga lona sobre las tablas que cubren el predio vacío, tiene la respuesta: “Visita pesos locos”. Es parte de la mercadotecnia después del temblor.
A unos 100 metros al sur del derruido palacio municipal, el comercio papelero, donde se surtían maestros y padres de familia del Istmo de Tehuantepec, se quebró con el terremoto del 7 de septiembre y no aguantó la réplica del sábado 23 y se desplomó. “Esa noche llovió y perdí toda la mercancía”, recuerda el comerciante José Ramón Caraveo Molina.
Esta ciudad zapoteca, considerada la capital comercial del Istmo, sufre aún los estragos del terremoto. Los locales comerciales están quebrados, pocos dueños de los locales obtuvieron financiamientos, debido a que la mayoría registraba deudas bancarias al momento del siniestro.
El propietario del negocio Servicios Profesionales de Papelería, tuvo la oportunidad de obtener un financiamiento para reconstruir el local, pero se desilusionó cuando supo que por cada millón de pesos que le prestarían, debería pagar 250 mil pesos.
“No pedí el crédito porque la tasa de interés es de 25%. Es una tasa muy alta y así, como está la economía colapsada, ni pensarlo”, comenta el comerciante que prefirió solicitar el financiamiento de sus proveedores.
En mercancía, obtuvo un préstamo de 3 millones de pesos que deberá cubrir en diciembre próximo.
Donde estuvo el negocio papelero, sólo queda un enorme claro, medio cubierto con tablones de madera. En ese lugar, Ramón Caraveo planea la construcción de una nave industrial para rentarla, que cuesta poco más de un millón, pero espera que con la ayuda de su familia pueda empezar el año entrante.
“Perdí todo”
A inicios de enero pasado, Julio Catalán reabrió su negocio de pintura que estuvo cerrado cuatro meses. “La noche del temblor perdí más de 800 mil pesos en mercancía. El gobierno no dio apoyos para la reconstrucción y nos abandonó. Sólo hubo ayuda para la reconstrucción de viviendas, no para los locales comerciales”, dice.
Julio renta una vivienda donde vive con su familia. La que era su casa tiene daños severos en la parte alta, donde albergaba sus habitaciones. Los arquitectos le dijeron que es riesgoso vivir ahí, sólo la parte baja resistió y ahí reabrió el negocio. Julio no tiene el dinero suficiente para que termine la reconstrucción de su casa de tres pisos. Va gastando unos 200 mil pesos.
Los ocho empleados que despachan en el negocio de pintura regresaron a trabajar en enero, cuatro meses después del sismo. Julio les pagó tres días por cada semana que no trabajaron. “Ellos también sufrieron pérdidas con el sismo y no podía dejarlos desamparados”, agrega.
El director General de BanOaxaca, Paulo César Ortiz Marcial, informa que después del terremoto se desplegó el apoyo económico para los emprendedores damnificados en 41 municipios del Istmo.
A un mes de que se registró el terremoto, recuerda Ortiz Marcial, BanOaxaca liberó 55 millones de pesos para apoyar con 10 mil pesos a cada uno de los 5 mil 500 comerciantes y prestadores de servicio del Istmo, inscritos y vigentes en el Sistema de Administración Tributaria (SAT), para que pudieran resarcirse de las pérdidas de mercancía; el apoyo fue a fondo perdido.
A través de BanOaxaca, los emprendedores que perdieron sus locales comerciales recibieron créditos que en total sumaron 40 millones de pesos; además, la institución otorgó microcréditos por 13 millones de pesos. En total, BanOaxaca impulsó préstamos de más de 334 millones de pesos a favor de seis mil 719 personas con actividades productivas.
En el marco de la primera conmemoración del sismo, adelanta el director General de BanOaxaca, Paulo César Ortiz Marcial, el gobernador Alejandro Murat Hinojosa dará a conocer un paquete económico de 100 millones de pesos más, para apoyar con créditos a mujeres productivas inscritas en el régimen fiscal y también para jóvenes emprendedores.
Estrena local comercial
Hugo López no cabe de gozo, BanOaxaca le prestó 200 mil pesos, 120 mil para la reconstrucción de su papelería y 80 mil para comprar mercancía. El préstamo deberá terminar de pagarlo en cinco años.
El local está en obra negra, pero ya luce cuadernos, mochilas, lápices, entre otros productos. La venta, dice, aún es lenta, sobre todo porque la calle donde está ubicada la papelería Donají, está cubierta de puestos ambulantes que vendían en el exterior oriente del Mercado 5 de Septiembre.
