Con vestidos zapotecas recuperan su identidad en escuela de Juchitán

Impulsan preservación de vestimenta y la lengua madre

La escuela recibió un reconocimiento del Museo Textil por cuatro años de revitalización de la lengua zapoteca. Fotos: Roselia Chaca
Especiales 17/07/2018 10:58 Roselia Chaca Juchitán de Zaragoza, Oaxaca Actualizada 10:58

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<p>“La gataná. La sa ¡Jma! (Escolta: Atención). Firme el paso. Redoblado ¡Ya!”, ordena en zapoteco Lucila a sus cinco compañeras de la escolta escolar durante el homenaje. Todas responden de inmediato ante la mirada y señas de Dalthon Pineda, profesor de educación&nbsp;física del <strong>Jardín de Niños Juan Escutia</strong>, de la colonia Heliodoro Vallejo Santander.</p>

<p>Lucila Sicarú García Aquino, Kitzia&nbsp; Santiago Ruiz, Keila Sánchez Ruiz, Luna Dxhirianii Jacinto Luis, Abril&nbsp; Ruiz Ramos y&nbsp; Naomi Hernandez Gómez son las nuevas integrantes del proyecto Lári Nandxó/<strong>Escolta, que impulsa la vestimenta tradicional en las escuelas&nbsp;</strong> y que desde hace cuatro años es&nbsp; implementado por el profesor y&nbsp; también poeta zapoteca.</p>

<p>El <strong>proyecto de preservación de la vestimenta tradicional y la lengua zapoteca</strong> comenzó luego de&nbsp; tres años de insistir a los padres de familia para que se sumaran, hasta que la necedad de Dalthon dio frutos y arrancó el sueño de&nbsp; acercar a los niños&nbsp; la&nbsp; identidad&nbsp; zapoteca. Dalthon explica que al principio fue difícil, pues “muchos de los padres no eran zapotecas, sino de otras zonas y no se identificaban con la vestimenta ni la lengua;&nbsp; otra complicación fue la&nbsp; diversidad de creencias religiosas”, refiere.</p>

<p>Fue hasta al tercer año de insistir que el docente con 10 años de experiencia&nbsp;logró concretar su propuesta, en parte&nbsp;“porque teníamos más padres de familias de <strong>Juchitán</strong>.&nbsp; Ahora nos imitan y nos reconocen”, destaca.</p>

<p><img alt="1_0.jpg" src="/sites/default/files/u10980/1_0.jpg" style="width:441px;height:331px;" /></p>

<p>En este cuarto año la institución recibió el <strong>reconocimiento del Museo Textil de Oaxaca</strong> por el trabajo de preservación de la vestimenta y la revitalización de la lengua zapoteca, pues las niñas marchan a ritmo de las órdenes en la lengua materna y&nbsp; el profesor canta el himno nacional&nbsp; en zapoteco; a esta última iniciativa se han sumado todas las maestras de la institución.</p>

<p>“Somos ejemplo en la región. En los Valles Centrales algunas escuelas ya implementaban en sus escoltas el traje tradicional de sus zonas, pero en el Istmo fuimos los primeros y sentamos un precedente”, dice la directora María Elena Toledo Esteva, y agrega: “Ahora,&nbsp; buscamos implementar que toda la escuela, niños y maestras, usemos la&nbsp;&nbsp;&nbsp; ropa tradicional zapoteca al menos en el acto de homenaje de los lunes”.</p>

<p><strong>Más barata&nbsp;</strong></p>

<p>Estela Ruiz López es madre de Lucila y ella confeccionó el bordado de su hija en el huipil, también&nbsp;realizó&nbsp;el que porta su sobrina.</p>

<p>Otras&nbsp;madres tuvieron que pagar el servicio de una bordadora, pero todas pagaron al menos 700 pesos por el traje que las niñas usan; la mitad del precio que cuesta un uniforme de escolta tradicional.</p>

<p><img alt="img_6002.jpg" src="/sites/default/files/u10980/img_6002.jpg" style="width:441px;height:294px;" /></p>

<p>“El traje de&nbsp; huipil y enagua, más trenzas y guaraches, costó 700 pesos, más barato que los mil 200 a mil 500 pesos que cuesta un uniforme de marinero o cadete. Además, todas las mamás participamos en el diseño del huipil, la selección de los colores. El reconocimiento es también de todas las mamás que hemos hecho nuestro el proyecto”, explica.</p>

<p>Las madres de familia refirieron que a las niñas les emocionan mucho participar con la vestimenta&nbsp; tradicional todos los lunes, por lo que son las primeras en insistir en arreglarse y llegar puntual al acto cívico. Por ello,&nbsp; aseguran que vestirse con el traje típico las ha acercado más a la identidad, no sólo a las niñas, sino&nbsp; también a&nbsp; las madres.</p>

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