De Polonia vino ayuda para Lavinia, damnificada por sismo

Los intermediarios del apoyo fueron integrantes de la asociación civil “Los Galácticos”, que promueve las manifestaciones artísticas en Juchitán, y ha encabezado labores de apoyo a damnificados

Foto: Roselia Chaca / EL UNIVERSAL
Especiales 22/09/2018 11:55 Roselia Chaca Juchitán de Zaragoza, Oax. Actualizada 11:46

La nueva silla de ruedas para Lavinia no llegó del gobierno municipal o del federal, ni de alguna organización médica mexicana, llegó desde Polonia a través de la deportista Zofia Radzikowska.

Lavinia es damnificada de los sismos de septiembre del año pasado, vive en Juchitán de Zaragoza, Oaxaca, y se dedica al pequeño comercio en el mercado local.

Los intermediarios del apoyo fueron integrantes de la asociación civil “Los Galácticos”, quienes leyeron la historia de Lavinia en EL UNIVERSAL, que ha seguido de cerca durante un año la historia de los sobrevivientes y damnificados por  los sismos.

Los niños del taller de música del espacio independiente fueron los encargados de entregarle a la señora Lavinia Valencia Suárez su nueva silla de ruedas y una dotación de medicamentos para tratar su diabetes. Lavinia, emocionada recibió el apoyo en su puesto de dulces en la extensión del mercado público de Juchitán.

La mujer 54 años de edad posee un pequeño puesto de dulces típicos en el mercado. Debido al uso diario, la silla de ruedas que le donaron ya se desgastó, por eso el grupo le gestionó su vehículo de movilidad.

A un año del sismo, Lavinia sigue viviendo debajo de unas lonas en el patio de su casa, ubicado entre callejones de la ribera del río en la Quinta Sección, pues su vivienda se vino abajo la noche del sismo, donde ella quedó atrapada.

Su pierna fue la más lastimada, en una primera revisión fue atendida por un médico privado sin lograr alivio,  un mes después fue internada en una clínica, también privada, donde la operaron para salvarle la vida; gastó todo lo que tenía y lo que no tenía, hasta el recurso del Fonden.

Durante la contingencia, Lavinia no tuvo acceso al servicio de salud gratuito, ni siquiera por el Seguro Popular, nunca fue inscrita ante el Registro Civil, nunca existió de manera legal, por lo tanto jamás tuvo acceso al servicio público de educación y de salud, todo el tratamiento que llevó hasta perder la extremidad derecha fue en el servicio privado.

Por cuatro meses, Lavinia no salió de su casa, hasta que en el mes de mayo la animaron a retomar sus dulces, regresar al mercado, ese espacio que para ella fue su terapia y la sacó de la depresión.

Además de ayudar a Lavinia, a través de “Los Galácticos”, la deportista polaca ayudó para el pago de estudios clínicos y tratamiento médico del niño damnificado Alejandro de Jesús Ramírez, que tenía fístula de seno cavernoso, y Marisol Gaspar Guzmán, que tuvo fractura expuesta de tibia y peroné.

Sigue apoyo de la sociedad

Después de un año, la sociedad civil mexicana, así como personas altruistas de otros países, siguen apoyando a los damnificados y sobrevivientes del sismo del 7 de septiembre del 2017 en el Istmo de Tehuantepec.

El Espacio Independiente de Expresión Cultural y Artística “Los Galácticos” es una organización de jóvenes y niños que promueve las manifestaciones artísticas en Juchitán, pero durante la contingencia humanitaria respondió apoyando con la repartición de víveres y fue enlace con altruistas de otros países para hacer llegar la ayuda internacional.

El joven cantautor zapoteca Giovanni Gutiérrez, vocero y coordinador del Espacio, informó que durante un año realizaron actividades en tres etapas que abarcaron la humanitaria y la reconstrucción económica.

En la primera etapa, de septiembre a octubre del 2017, lograron recaudar 500 despensas, 100 lonas, 100 camas de campaña, 200 paquetes de ropa para niños y adultos, de parte de “Los Galácticos”, empresarios de Tuxtla Gutiérrez y del corporativo Vera y Vera Soluciones Integrales, Sociedad civil de la ciudad de México, Estados Unidos e Inglaterra, Médicos de la ciudad de Oaxaca, entre otras donaciones.

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En la segunda fase, de noviembre del 2017 a enero del 2018, gestionaron 65 ollas para hornos de comixcal, teniendo como donadores a los fotógrafos michoacanos Jesús Cornejo y a la revista “México Desconocido”.

También lograron repartir 270 Juguetes, y material didáctico en español y zapoteco para niños, teniendo como donadores a los cantantes Miroslava Cruz Ferra de Juchitán, Naza H.C. de Querétaro y a Los Mariachis futuristas de la CDMX.

En una tercera etapa consiguieron la donación de dos guitarras y cinco becas por seis meses para clases de música istmeña y guitarra, aquí los donadores fueron Karina Nuricumbo y Newcastle.

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