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En la Secundaria Técnica número 50, por ejemplo,se encargaron dela construcción de tres aulas equipadas con mobiliario, mismas que fueron dotadas de cuatro paneles solaresde 1.2 kilowatts,con capacidad para generar 276 kilowatts hora de energía al mes, suficientes en una casa normal para alimentar un refrigerador, aire acondicionado, televisores y demás electrodomésticos.
José Juan Carrasco López, director de la escuela, explica que cada bimestre el pago de la energía eléctrica es cubierto por el IEEPO, por un monto de hasta 30 mil pesos. Con los paneles, la dependencia educativa tendrá un ahorro de hasta 15 mil pesos.
Carlos López, asesor del IEEPO, dice que la institución celebró la iniciativa de donación y dotación de energía limpia a las escuelas en reconstrucción, por lo que ya se hicieronlas gestiones ante la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para que las aulas operen con la modalidad alternativa y se ahorre el costo del consumo.

En el otro extremo de la ciudad de Juchitán, en el corazón de la Séptima Sección,los 397 alumnos de la Primaria Año de Juárez —con 53 años de antigüedad— siguen en 16 aulas provisionales, pues la empresa contratada porel Iocifed lleva apenas 50% de los trabajos en ocho aulas. En las restantes ni siquiera ha comenzado la obra.
Según Raquel Matus Montaño, director de la primaria,fueron 16 las aulas demolidas completamente por los daños que dejó el terremoto; sólo se salvó un domo y un salón. Es debajo del domo donde se construyeron las aulas provisionales que, a pesar de ser seguras, se calientan mucho después del mediodía, por lo que tras un año y medio, los alumnos ya están desesperados por la situación.
La buena suerte cayó en ellos cuando los Topos de Tlatelolco les donaron los baños solares, pues aunque tenían provisionales, eran insuficientes. Ahora, después de cinco meses de trabajos acaban de estrenar seis sanitarios para niños y seis para niñas, que cuentan con siete lavamanos y tres mingitorios, así como espacio para niños con capacidades diferentes.
“Son sanitarios de calidad, mucho más resistentes que los que está construyendo el Iocifed. Para construirlos, llegaron especialistas para seleccionar el material que se iba a emplear, desde el cemento hasta la arena. Tiene una estructura muy fuerte, pero lo mejor es que son solares. Ninguna escuela de la región tiene baños solares”, explica el directivo.
Y todo, dice, gracias a los topos, cuyas acciones comienzan cuando la capacidad del gobierno es superada.