Cifras rojas: UABJO cerró 2019 con un déficit de 640 mdp
El Congreso local no concedió a la Universidad un aumento requerido de más de 40%; culmina 2019 con presiones de gastos
La Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) cierra el año 2019 con un déficit financiero de 640 millones de pesos, resultado de los pasivos que arrastra desde años anteriores, de acuerdo con un diagnóstico elaborado por la Secretaría de Educación Pública (SEP).
A ello se suma que aunque el rector de la UABJO, Eduardo Bautista Martínez, junto con académicos, estudiantes y autoridades universitarias solicitaron un aumento del presupuesto de más de 40%, los diputados de la 64 Legislatura del Congreso local sólo autorizaron un incremento mínimo, al pasar de mil 82 millones que recibió en 2019 de recursos federales y estatales, a mil 82 millones 938 mil pesos.
Según el rector, por el arrastre de dicho déficit, la institución cierra el año con presiones de gasto para el cumplimiento de sus obligaciones laborales y para el cierre del ejercicio presupuestal de este año.
Pese a ello, asegura que con la política de disciplina financiera que emprendió la UABJO desde 2016 se ha registrado un ahorro sustantivo por 255 millones de pesos en tres años, recursos que han sido transferidos a gastos de operación y para gastos de servicios personales.
“Eso ha permitido inhibir los momentos de presión, de insolvencia y esto ha sido muy favorable, porque al día de hoy podemos decir que estamos cumpliendo con nuestras obligaciones laborales de fin de año”, afirma.
Suma de deudas
Pero la UABJO no es la única universidad del país que cerrará con deudas y números rojos, pues en total son nueve las instituciones que enfrentarán, al 31 de diciembre de 2019, un déficit presupuestario total de 15 mil 905 millones de pesos que se reflejará en un problema de liquidez que, de no atenderse de manera estructural, dificultará el pago de nómina, prestaciones, pensiones y jubilaciones, así como gastos de operación, advierte la SEP en el documento.
255 millones de pesos es el ahorro sustantivo que ha reportado en tres años.
Además de la UABJO, las casas de estudio que enfrentan este problema financiero son las universidades autónomas de Chiapas (UNACH), del Estado de México (UAEM), la del Estado de Morelos (UAM), la de Nayarit (UAN), la de Sinaloa (UAS), la Juárez de Tabasco, la de Zacatecas (UAZ) y la Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH).
En dicho documento se había pronosticado que en abril de 2018 el déficit de estas instituciones de educación ascendiera a 15 mil 509 millones de pesos, pero en un segundo diagnóstico realizado a mediados de este año la proyección aumentó —considerando los pasivos históricos— a 16 mil 677 millones de pesos. Sobre este último, las universidades han asegurado ahorros por 722 millones de pesos que reduce el déficit a 15 mil 905 millones.
Aun así, este monto es superior al diagnosticado en un primer momento, lo que indica que la situación deficitaria de las universidades está aumentando y “requiere una solución estructural, así como acciones concertadas y coordinadas entre los gobiernos estatales, la SEP y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) con un horizonte de mediano y largo plazo”.
La magnitud de este déficit acumulado equivale a 71% de su subsidio público ordinario, el cual asciende a 23 mil 461 millones de pesos para las nueve universidades.
La SEP detalla que, sin considerar los pasivos históricos acumulados, la suma del déficit de operación proyectado a 2019 se estima en 5 mil 606 millones de pesos y representa 24% del subsidio, con un rango de variación entre 7% y 52%. Las universidades con déficit de operación que supera la tercera parte del subsidio público son la UAN, UJAT, UNACH y UMSNH.
Por su parte, las medidas de racionalidad financiera propuestas por las universidades representan un ahorro de 772 millones de pesos, es decir, apenas 14% del déficit de operación del conjunto de instituciones.
En resumen, precisa, considerando los ahorros institucionales, el déficit para finales de año, con pasivos acumulados, ascendería a 15 mil 905 millones de pesos.
“Como en años anteriores, independientemente de los planes de austeridad y racionalidad financiera, el déficit estimado para el cierre de 2019 se reflejará en un problema de liquidez que, de no atenderse de manera estructural, les dificultará el pago de nómina, prestaciones, pensiones y jubilaciones, así como gastos de operación”, advierte la SEP.
