"Para nosotras cada caso, como el de Maribel, Guadalupe o Wendy, por mencionar algunos, tienen un nombre y un apellido, pero sobre todo constituye una tragedia que merece justicia", dijo la activista, durante la actividad efectuada en el Centro Cultural y de Convenciones de Oaxaca.
"En primer lugar consideramos que el fenómeno de la violencia no se ha visibilizado adecuadamente para que todas y todos identifiquemos la manera en la que somos parte y cómplices: si la replicamos, la estimulamos, la negamos, la promovemos, si no la sancionamos y aún si la solapamos", completó.
Además, a nombre de las organizaciones que han acompañado a las mujeres en situaciones de violencia, exigió una real voluntad política para llevar a cabo el programa presentado. Ésta se expresa de múltiples formas, principalmente con una actuación firme y decidida contra la impunidad, la discriminación y las graves omisiones de las autoridades.
"Lo invitamos a usted señor gobernador a hacer suya ésta causa a favor de más de la mitad de la población del estado. A encabezar con su ejemplo el seguimiento puntual de las acciones propuestas, para impulsar con los integrantes de su gabinete en la identificación de las terribles inequidades presentes en la sociedad y a adentrarse en la perspectiva de equidad de género, herramienta que les permitiría hacer política pública con visión de género", acotó.
Y es que para las activistas que por años han asumido la tarea de visibilizar y atender casos de violencia, "esta administración ha tenido dos años para demostrar su compromiso, las 275 mujeres que han perdido la vida de manera violenta dicen lo contrario, incluida la joven fotógrafa María del Sol Cruz Jarquín, hija de nuestra compañera periodista Soledad Jarquín, quién desde hace nueve meses ha demandado un derecho negado de justicia que hoy les recordamos. Demuéstrenos con hechos su compromiso", reclamó.