En entrevista, Anuar Mafud informó de estos recursos asignados a los indígenas triquis cuando se le cuestionó sobre las continuas protestas de Lorena Merino, una de las líderes de los triquis desplazados de su comunidad desde finales de 2010 y quienes han pernoctado en el Palacio de Gobierno frente al zócalo capitalino e instalado puestos comerciales para la venta de ropa.
“Proveemos pues de todo lo que una familia requiere para vivir, yo diría que hasta con comodidad. A Lorena Merino el gobierno le paga la renta de un local en el centro histórico, ya está cerrado el local, ella decidió irse al palacio de gobierno para hacer su negocio, sus vendimias. La última vez que hablé con ella fue para pedirle que regresara a su local porque no puede ser que se rente y no lo ocupen”, declaró.
Lorena Merino, agregó, se ha negado a recoger 780 despensas que el Gobierno del Estado les otorgó; asimismo, le han insistido en que ocupe el local que el gobierno le renta y deje la vía pública que ocupa sin permiso de la autoridad municipal.
“Fuera de ahí no le hemos pedido a la señora nada, no la hemos ofendido, la hemos tratado con respeto, con tolerancia; pero bueno, en cambio ella el primero de septiembre llegó a agredir”, dijo.
Al resto de indígenas triquis beneficiarios de medidas cautelares, precisó, también se les rentan locales para que ahí trasladen sus ventas que actualmente realizan en el Palacio de Gobierno; pero sólo los usan como bodegas. También a ellos se les otorgan despensas, renta de viviendas y otras prestaciones.
“Desde el punto de vista material, no les falta, porque además tienen un negocio. No estamos descalificando su condición de desplazados, lo que pasa es que confundimos la medida cautelar, con una medida que te da fuero, impunidad y demás”, señaló.