Entre  2011 y 2013 el gobierno de Oaxaca contrajo  créditos por 4 mil 290 millones de pesos para afrontar  la  reconstrucción y reparación de daños causados por fenómenos naturales, según información de la Secretaría de Finanzas.  Ese monto es 350% mayor a los mil 200 millones que  el Congreso local aprobó  el 30 de septiembre para costear la devastación que dejaron el mes pasado  los  peores sismos que ha padecido el territorio oaxaqueño.  En total, la entidad tiene  por desastres naturales una deuda pública  superior a los 5 mil 490 millones de pesos. 

Créditos millonarios

En octubre del 2011, el huracán Jova azotó el territorio oaxaqueño, pero no fue el único dessastre natural de ese año, pues una onda y  una tormenta tropical también golpearon Oaxaca. El saldo de dichos eventos fue de dos muertos,  941 mil 178 personas afectadas y   55 municipios  declarados  en emergencia,  en 43 de ellos  hubó declaratoria de  desastre natural.En junio de ese año, el gobierno estatal, que  encabezaba   Gabino Cué, adquirió una deuda con Banobras por 2 mil 82 millones 453 mil 349.8 pesos y justificó  que esos recursos serían destinados a la reconstrucción de daños causados por los desastres arrastrados  del 2010, para los cuales “no había previsiones presupuestales en la tesorería estatal”. Esos créditos vencen en agosto de 2031.

En el 2012, el sismo del 20 de marzo y sus réplicas del 3 de abril, sumados a  los huracanes Carlotta y Ernesto, afectaron a 317 municipios, por lo que se emitieron  siete declaratorias de desastre. Según la información oficial, en conjunto esas emergencias  implicaron la  reconstrucción de  34 mil 5 viviendas, 293 caminos, 304 espacios educativos, 19 espacios de salud y 10 edificios patrimoniales.

Resarcir los daños demandó una inversión estimada de 3 mil 412 millones 800 mil pesos que, según el gobierno estatal, “se reportaron al Fondo de Desastres Naturales (Fonden): 781 millones 300 mil pesos por los sismos y 2 mil 631 millones 500 mil pesos por los fenómenos hidrometeorológicos”.  De ese total la administración estatal  adquirió el 10 de agosto  una deuda pública de 316 millones de pesos con Banobras a un plazo de 20 años, por lo que se seguirá pagando hasta el año 2032.

En el 2013, el huracán Ingrid y la tormenta tropical Manuel causaron daños en 76 municipios y en 60 de ellos se declaró zona de emergencia. La población afectada ascendió a 761 mil 22 personas y se dañó una longitud de  mil 222.27 kilómetros de la red carretera.

Ese año, el gobierno estatal  adquirió tres nuevas deudas públicas que sumadas  ascendieron a mil 892 millones de pesos. Un primer crédito se contrató el 12 de abril por 200 millones de pesos con Interacciones, el cual venció el 30 de noviembre de 2011 y del que aún se deben 95 millones 371 mil pesos.  La seg unda fue el 28 de noviembre por 300 millones de pesos con Banobras y se contrató hasta el 2034., y sólo unos días después, el 18 de diciembre, se contrajó  un tercer crédito a 15 años  por mil 392 millones de pesos “para reconstrucción y reparación de daños causados a la infraestructura generada por fenómenos naturales durante 2011 y 2012”.

Estos mil 892 millones  se contrataron aún  cuando en esos años ya se  había adquirido una deuda con los mismos fines.  La última deuda pública se autorizó este 2017 por un monto de mil 200 millones de pesos para atender la contingencia ocasionada por  los sismo del 7 y 19 de septiembre que  afectaron 364 municipios, principalmente a la región del Istmo de Tehuantepec y la Mixteca.

Mientras el endeudamiento público por fenómenos naturales se disparó en la entidad, el presupuesto para ese rubro aprobado por los diputados locales, a iniciativa del gobernador, apenas rebasa los  3 y 6 millones de pesos.  De acuerdo con los presupuestos de egresos del estado de Oaxaca, en sólo tres de los últimos siete años se ha destinado una partida presupuestal para desastres naturales.

En el año  2014 fue de 567 mil 409.92 pesos, en el año 2015 subió a 3 millones 229 mil 503 pesos y para este  2017 bajó a los 3 millones.

Piden investigar si hubo desvío

Aunque ellos son los responsables de su aprobación,  diputados de las fracciones del PRI, PRD y Morena aceptaron que es insuficiente el presupuesto  destinado para la atención a  desastres naturales y cuestionaron la contratación de la deuda pública en esta y la anterior adminitración.   La coordinadora de la bancada del PRI, María de las Nieves García, cuestionó la deuda contraída por  Gabino Cué  y aseguró que esos recursos fueron desviados para otros fines;   agregó que  las instancias correspondientes deberán investigar.

Mientras que el vicecoordinador de la bancada del PRD, Horacio Mendoza, criticó el bajo presupuesto que se destina para desastres naturales, pues afirmó que “no alcanzan ni para una campaña de prevención”; sin embargo, justificó el  endeudamiento aprobado a Murat y calificó como “oportunismo político” la posición de Morena al oponerse al crédito.

María de Jesús Melgar Vásquez, diputada de Morena, áfirmó  que en su partido no  avalaron el nuevo crédito porque había otras formas de financiamiento  para la reconstrucción, como  reducir presupuestos de algunas   aéreas como la de  Comunicación Social.