Frenan reconstrucción prometida en 48 escuelas
Autoridades estatales y federales no cumplieron con la supervisión y menos con el reinicio de las obras en planteles ubicados en Salina Cruz, Tehuantepec, Ciudad Ixtepec, Matías Romero, Reforma de Pineda y Juchitán.
En la Séptima Sección de esta ciudad, un barrio de pescadores y mujeres totoperas, hay un espacio educativo que comparten dos escuelas primarias: por la mañana se llama Año de Juárez y por la tarde su nombre es Guillermo Prieto.
Los 23 salones, área de dirección y biblioteca se colapsaron con los sismos de 2017 y hasta ahora los alumnos estudian en aulas provisionales donde no se aguanta el calor.
De los 23 salones que tenían ambas escuelas, sólo 14 tienen el techo colado, pero les falta piso, puertas y ventanas. El resto sigue en espera de la reconstrucción y, a pesar de que la constructora se comprometió a terminar los trabajos el 30 de julio pasado, fue hasta el 23 de septiembre que tras una revisión física los trabajadores aseguraron que la entrega sería el 30 de noviembre.
Ante dicha promesa, los padres y docentes pidieron que se contrataran más obreros, pero la constructora abandonó la obra.
Foto: Edwin Hernández
Por ello, el pasado 19 de septiembre, los maestros de los seis sectores que la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) tiene en la región del Istmo bloquearon las carreteras Panamericana y Transístmica.
Así lograron una mesa de diálogo con funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu); del Instituto Nacional de la Infraestructura Física y Educativa (Inifed) y el Instituto Oaxaqueño Constructor de Infraestructura Física Educativa (Iocifed), quienes se comprometieron a reiniciar la reconstrucción en 48 planteles, de 518 demolidos y abandonados desde hace año y medio.
Acusan incumplimiento de autoridades para levantar planteles
Las autoridades estatales y federales no cumplieron con la supervisión y menos con el reinicio de la reconstrucción en planteles ubicados en Salina Cruz, Tehuantepec, Ciudad Ixtepec, Matías Romero, Reforma de Pineda y Juchitán, municipios donde también hay 100 escuelas más que no fueron consideradas en ningún programa y, por tanto, no tienen recursos para financiar la reconstrucción, acusa el representante regional de la Sección 22 del SNTE, Carlos Cruz.
“Hay retraso en los compromisos que asumieron las autoridades federales y estatales... no es posible que a más de dos años del terremoto todavía alumnos y docentes trabajen en espacios provisionales e inadecuados”, apunta el representante de la Sección 22.
“No nos pagan”
Por otro lado, unos 22 constructores de la región del Istmo, que fueron subcontratados por el Grupo Salcedo, que recibió 123 contratos para reconstruir igual número de escuelas, denunciaron que desde agosto del año pasado no les han pagado los avances físicos que ya reportaron ante el Iocifed.
Desde la primera semana de septiembre, los constructores, que en conjunto reclaman un pago de unos 20 millones de pesos, bloquearon la carretera en esta ciudad juchiteca y lograron que las autoridades estatales y representantes del Grupo Salcedo se comprometieran a revisar los avances físicos para que después se les diera un anticipo de la deuda, con el propósito de reanudar la reconstrucción de las 123 escuelas. No cumplieron.
Foto: Edwin Hernández
“A la fecha no han supervisado las obras ni han pagado lo que nos deben, a pesar de que con tiempo presentamos los avances físicos”, dice Tomás López Pineda, uno de los constructores, quien fue subcontratado para reconstruir 10 aulas de la escuela primaria Adolfo C. Gurrión, ubicada en la Quinta Sección.
“Mi constructora ya levantó seis salones, pero ¿porque no me han pagado desde agosto del año pasado? No hemos podido avanzar y tenemos deudas con los proveedores de los materiales de construcción y también debemos al banco que nos facilitó un financiamiento”, lamenta el constructor.
Ante la falta de pagos, los constructores locales decidieron mantener suspendidos los trabajos en los planteles: “Vamos a esperar que hagan la revisión, que nos paguen y entonces volveremos a trabajar”, asegura López Pineda, quien insta a los funcionarios de Iocifed que liberen dichos pagos.
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