De acuerdo con la gráfica presentada sobre la evolución de los contagios en la capital oaxaqueña, la pandemia aún está lejos de estabilizarse, para después comenzar a descender, y se espera que el pico de contagios se dé entre el 9 y 11 de junio próximos.

La lámina mostrada señala que los contagios confirmados en la capital ya sobrepasaron por mucho el máximo de casos que se tenían proyectados para esta ciudad en el pico de la curva, que aún dista más de dos semanas por llegar, por lo que los casos podrían ser muchos más de continuar observándose esa tendencia.
“La predicción no se está apegando a la realidad. No es un problema de la predicción, es un problema de qué está pasando en Oaxaca respecto de la movilidad social que es el determinanate crítico”, indicó López- Gatell al mostrar los datos de la ciudad de Oaxaca.
“Oaxaca es un estado muy disperso, geográfica, social y culturalmente, lo que lleva a que se concentré en la capital la atención hospitalaria, pero ese comportamiento no siga en todo el estado”, indicó.
Agregó que lo anterior se explica dado que en territorios extensos, los contagios no se comportan como una sola epidemia y difícilmente entran en sincronía “las epidemias en cada territorio reconocible”, pues éstas se comportan de manera aislada.
Sobre la situación hospitalaria en el estado, los datos federales indican que hay un 24% de ocupación hospitalaria frente a un 76% de disponibilidad; mientras que de las camas con ventilación mecánica, necesaria para los pacientes de Covid-19 graves, están ocupadas 37% del total.