Buscan reconstruir el Istmo con restos de sus viviendas
La propuesta sustentable de arquitectos y asociaciones que ya se puso en marcha en las zonas afectadas del municipio de Asunción Ixtaltepec
Un grupo de profesionistas de diversas disciplinas, como arquitectos y biólogos, se han sumado a la reconstrucción de la zona del Istmo, una de las más afectadas en Oaxaca por los sismos de septiembre. Construirán casas priorizando el reciclaje de materiales recuperados de los escombros, y tomarán en cuenta el clima e incluso aspectos culturales para diseñar las nuevas viviendas.
La Alianza Tierra, que agrupa a empresarios oaxaqueños, profesionistas y organizaciones como EcoConstructores, Individuo-Comunidad Naturaleza A.C. (Inconat), Unidos por Ti, y la Universidad del Medio Ambiente, propone tres etapas de reconstrucción:
1.- El rescate de escombros que pueden ser reutilizados en las nuevas casas.
2.- Definir la tipología de vivienda que las familias necesitan.
3.- Construir la casa aprovechando todos los recursos disponibles para reducir los costos.
El arquitecto Marcos Sánchez, fundador de EcoConstructores, explicó, en entrevista con EL UNIVERSAL, que su propuesta se basa en “aprovechar todos los recursos disponibles: hay ladrillos que sólo necesitan limpiarse, hay maderas preciosas, porque esta zona utiliza maderas duraderas y preciosas, hay puertas y ventanas hechas con esa madera, y herrería, hay pisos que se pueden recuperar casi al cien por ciento”.
“No hay una lectura clara hasta que no la visualizas cómo que eso que está tirado ahí, eso que tumbó el terremoto, son materiales que se pueden reutilizar”, abundó.
En Oaxaca, de acuerdo con el censo realizado por el gobierno del estado al 30 de septiembre, hay 14 mil 352 casas que fueron declaradas como pérdida total y otras 21 mil 41 con daños que las hacen inhabitables.
En esta entidad, el gobierno federal comenzó con la entrega de apoyos para la reconstrucción. Se trata de una tarjeta con valor de hasta 120 mil pesos para la construcción de los nuevos hogares.
Sin embargo, para Emelinne Flores Luna, fundadora de Inconat, este recurso resulta insuficiente para construir un hogar acorde con las necesidades de las familias que habitan el Istmo, una zona donde se debe tomar en cuenta, el clima cálido tropical y las constantes lluvias.
“Desafortunadamente la única forma que el gobierno tiene ahorita (de ayudar) no le permiten cambios muy radicales. Es construir casitas tipo Infonavit, y esto rompe completamente con la cultura, con el patrimonio arquitectónico, y les reduce muchísimo la calidad de vida a las personas”, dijo en entrevista.
La iniciativa de esta alianza, explicó Emelinne Flores, ya arrancó en el municipio de Asunción Ixtaltepec con una primera etapa, la de rescatar los residuos que pueden reutilizarse.
“Eso implica, meterte a los escombros, sacar ladrillos, sacar tejas, sacar polines, herrería, pisos inclusive, para poder volverlos a reutilizar. Esto ayuda a bajar el costo del nuevo inmueble”, indicó.
Explicó que ésta es una labor que se tiene que hacer “casi de casa en casa, para ver qué personas están interesadas en que se les construya o se les ayude a construir sus viviendas de este modo”.
Flores detalló que una vez que las familias se muestran interesadas, se prosigue a crear una brigada, donde participan expertos, voluntarios y la misma comunidad, que va a la zona de derrumbe a comenzar a seleccionar los residuos que aún sirven.
El arquitecto Marcos Sánchez, quien a la hora de la entrevista encabezaba una brigada de recuperación de escombros en Ixtaltepec, señaló: “aquí hay millones de pesos tirados. Hay millares de ladrillos en todos lados que se pueden reutilizar, que se pueden limpiar, hay pisos, hay puertas”.
“Lamentablemente la acción de algunos gobiernos municipales ha sido venir y llevárselo como si fuera escombro, como si fuera basura que se está pudriendo”, lamentó.
Marcos narró que así como han comenzado con las labores de reciclaje de los escombros, en algunos casos la gente se muestra arrepentida de haber permitido que se llevaran lo que quedó de sus hogares sin antes hacer esa separación.
“¿Por qué no recogieron sus ladrillos? Porque no les dieron tiempo de nada, y es lógico estaban en shock”, dijo.
LA TIPOLOGÍA DE LAS VIVIENDAS
El arquitecto oaxaqueño, que encabeza EcoConstructures, un despacho especializado en la construcción de viviendas de tierra y otros elementos naturales, destacó que la segunda etapa de su propuesta es ayudar a la población a que prioricen las características principales del espacio que habitan.
Lo anterior tiene que ver con la tipología de las viviendas, que explicó, incluye tomar en cuenta el clima, los materiales disponibles, e incluso las costumbres de las comunidades, sus tradiciones, cosmovisión y la apreciación del espacio a la hora de construir el inmueble.
“El temor que tenemos es que por una mala estrategia, estas comunidades se llenen de miles de casas de cuatro por cuatro, mal hechas, que la gente no va a poder vivir en ellas”, alertó.
Dijo que aunque su especialidad es la construcción con tierra, en la zona lo que se debe priorizar es la utilización de todos los recursos con que se cuenten.
Sánchez alertó que “por una mal análisis, por una mala interpretación del espacio, de la cultura, y de la adopción del usuario a esos espacios”, la zona se puede llenar de casas inservibles para la población.
“Aquí la tipología de vivienda son espacios muy altos, hasta de cinco o seis metros, por el calor y la humedad, por el clima que tenemos acá”, precisó.
Finalmente señaló que el objetivo de la alianza es orientar a las familias para aprovechar los cinco recursos que ellos ven disponibles en la zona: el presupuesto que otorga el gobierno, la autoconstrucción, el reciclaje de los materias, la ayuda que brindan voluntarios independientes y la ayuda que vendrá de organizaciones y organismos.
Inconat lanzó una petición, a través de Fondeadora, para también recibir aportaciones monetarias que sumarán al proceso de reconstrucción. En la página se explica que el dinero se irá directamente a la compra de materiales de construcción.