Tuvo Oaxaca 5,100 protestas en 2017: Coparmex
Demanda organismo empresarial atención a demandas sociales; solución no es fuerza pública sino diálogo, dice
Alrededor de cinco mil 100 protestas sociales y magisteriales se registraron durante el año 2107, consideró el Centro Oaxaca de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
Asimismo, según sus estadísticas, en promedio se registra un promedio de 14 manifestaciones por día y la capital del estado es la más afectada por las movilizaciones, con dos mil 16.
“Para el 2018 las cosas no pintan mejor, de enero a marzo se han registrado mil 194 manifestaciones en todo el estado”, dijo en un comunicado.
Indicó que el año pasado, las protestas de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) representaron menos de la quinta parte del total, con 897, el resto cuatro mil 203 fueron realizadas por organizaciones de la sociedad civil distintas a la referida.
“Los costos de estas manifestaciones son incuantificables, en el ámbito económico, se dan cierres de comercios con la consecuente pérdida de ventas y utilidades; en el ámbito familiar la baja en el ingreso a causa del ausentismo laboral y el despido de empleados.
“En lo que se refiere a la movilidad, se generan severos problemas de tránsito y una operación deficiente del transporte público con costos similares a los ya comentados.
Incuantificable y quizá más severo es el enojo social provocado por los hechos descritos que llega a enfrentar a la ciudadanía con estos grupos sociales dañando más el ya deteriorado tejido social”, refirió.
Expuso que la creciente tendencia de la protesta social en Oaxaca “es preocupante, sabemos que este problema no nació con esta administración, que lleva décadas cultivándose pero la sociedad ya no aguanta más, urgen soluciones”.
La Coparmex Oaxaca, que encabeza el empresario Raúl Ruiz Robles, indicó que ha sido enfática en señalar que no es la fuerza pública la solución a esta problemática, sino la gestión política eficiente y oportuna.
También, “el cumplimiento de las promesas de campaña, la transparencia en la gestión pública, la creación de empleos formales y bien remunerados y, muy importante, el combate contundente e inobjetable a la impunidad.”