Industria mezcalera, de las más afectadas si pasa impuesto de 4.5% a bebidas alcohólicas
Este nuevo gravamen es similar al que se ha impuesto en estados como Aguascalientes, Baja California, Campeche, Estado de México, Nayarit, Querétaro, y Yucatán
Para el próximo año, el gobierno de Oaxaca propone la creación de un nuevo impuesto de 4.5% “sobre la venta final de bebidas de contenido alcohólico”, según lo contemplado en el paquete económico entregado a los diputados de la 64 Legislatura.
Este nuevo gravamen es similar al que se ha impuesto en estados como Aguascalientes, Baja California, Campeche, Estado de México, Nayarit, Querétaro, y Yucatán.
De acuerdo con la propuesta de reforma a la Ley de Hacienda Estatal, el gobierno estatal pretende recaudar 6.3 millones de pesos al año para las finanzas públicas del estado; sin embargo, representantes de la industria del mezcal advierten riesgos sobre este impuesto.
El presidente del Consejo Regulador del Mezcal (CRM), Hipócrates Nolasco Cancino, dijo que este impuesto sería adicional a los impuestos federales al 53% de IEPS, 16% de IVA, del 30 al 33% de ISR, con el que el mezcal se encuentra gravado actualmente.
Por estos impuestos, se incrementa en más del 100% el precio del mezcal “convirtiéndolo en la bebida más cara de México, impidiendo que los comercializadores y mezcaleros artesanales y ancestrales se integren a la formalidad”.
“Por su forma artesanal y ancestral de producción, el mezcal tiene un costo de producción alto, por lo que, desde hace varios años estamos luchado para que los impuestos del mezcal no sean porcentaje sobre el precio de venta, porque este hace más caro los productos artesanales, estimulando, en contrasentido al desarrollo de Oaxaca, la producción industrial y volumétrica que hace muy barata la producción de una espirituosa, pero que no generan desarrollo rural, ni social, ni económico para el estado, sino para la empresa en particular”, explicó.
Nolasco Cancino pidió al gobernador Alejandro Murat no aplicar un impuesto más al mezcal y que al contrario, les ayude a disminuir los impuestos que actualmente se cobran a esta bebida con el objetivo de seguir generando desarrollo regional en toda la Denominación de Origen Mezcal y en la que el estado es preponderante.
El líder del CRM argumentó que el impuesto no es funcional y genera un incentivo contrario a lo que pretende él gobierno, (recaudar 6.3 millones de pesos) porque algunos productos y puntos de venta migrarán al mercado ilegal e informal.
“La recaudación será menor para el gobierno del Estado, existen varios ejemplos de ello, Querétaro esperaba recaudar 80 millones de pesos y sólo recaudó 10 millones de pesos y por el contrario estimuló las bebidas ilegales, superando la media nacional del 40%”.
Además, advierte que en los estados donde se ha implementado este impuesto ninguno es productor de bebidas espirituosas y Baja California que produce vino, año tras año exenta a los productores, es decir, el impuesto solo está escrito, pero no es aplicado; “sabedores que es un desincentivo al empleo, inversión, competitividad, turismo del estado, entre otros factores”, dijo.
Pero también aseguró que es contradictorio que en un estado como Oaxaca que es protagonista del mezcal y sobre todo por el contexto de desarrollo social, rural y económico que se ha generado, ahora se pretenda frenar con impuestos en su comercialización.
“Si de por sí, resulta contradictorio que el Mezcal se pueda adquirir a menor precio en otros países que en México debido a los impuestos nacionales, resultaría aún más contradictorio que en Oaxaca siendo La tierra del Maguey y del Mezcal, sea más caro adquirir la misma botella que en cualquier otro estado de la República”.
De acuerdo con el dirigente mezcalero, un impuesto a la venta final de bebidas con alcohol generaría un retroceso en el mezcal a nivel nacional y principalmente en Oaxaca, no sólo en materia de consumo, también de inversiones, competitividad, innovación, empleos, desarrollo local, turismo, así como debilitamiento de la cadena de valor del mezcal y afectará a todos aquellos que trabajan formalmente; incentiva la informalidad con el consiguiente riesgo a la salud y la vida de los consumidores debido a las bebidas apócrifas.
Este nuevo impuesto propuesto, según el presidente del CRM, es anacrónico y copia fiel del que está contenido en la Ley de Ingresos del Estado de México creado en el año 2017.
“El mezcal que está dinamizando la economía social, sobretodo la rural, por ello, es contradictorio copiar el plan de ingresos del Estado de México al de Oaxaca sin hacer el análisis pertinente”, dijo.
Para obtener ingresos por 6.3 millones de pesos que se busca recaudar con el impuesto a las bebidas alcohólicas, Nolasco Cancino propuso al gobierno estatal otras alternativas diferentes a las de un gravamen.
La primera de ellas es reasignar los 9 millones de pesos que la Secretaría de Economía pagó a una sola empresa por el evento Vive Mezcal: los 6.3 millones de pesos que se espera recaudar con este impuesto se dejan de erogar en el mismo, e incluso, el remanente puede ser utilizado para un evento menos ostentoso, “acorde a la austeridad que el ejecutivo federal ha promulgado y que posicione con mayor eficiencia a los pequeños y micro productores”.
Una segunda propuesta es actualizar el presupuesto de ingresos 2020 en el cual se indica que el estado espera ingresos del orden de 4 millones 475 mil 86 por concepto de la Feria del Mezcal; sin embargo, en las declaraciones de Juan Pablo Guzmán, Secretario de Economía, ha señalado que en 2019, este evento tendría una derrama de más de 20 millones de pesos). Por lo cual, dijo, sería factible tomar de las ganancias de este evento para obtener el ingreso indicado en el presupuesto 2020 para cubrir los 6.3 millones estimados por recaudar con este impuesto.
“Incluso se tiene un incremento en los ingresos por 8 millones de pesos que deben destinarse a acciones precisas para los mezcaleros y magueyeros del Estado”.
También propuso evitar el uso de 1.5 millones de pesos en beneficio de unas cuantas empresas y ejemplificó con el caso de Gugar Soda a Estados Unidos, marca de la familia del secretario de Economía Juan Pablo Guzmán.
Otro ahorro, agregó, puede darse en proyectos como el que apoyó el mismo secretario por 4.8 millones para generar una empresa dedicada al análisis de diferentes bebidas como Tequila, Sotol y Bacanora, que se producen en Jalisco, Sonora, Chihuahua, entre otros estados del centro y norte país, muy alejados de Oaxaca.
“Sumando estos dos proyectos (Gugar y la empresa de análisis) apoyados con el presupuesto del Estado, se dejan de gastar 6 millones 370 mil pesos, monto similar a lo que se desea recaudar con el 4.5% al consumo”, aseguró.