En 2017 se rebasó el récord de las dos últimas décadas de sismos de esta magnitud para un solo año, con 280 casos hasta el pasado 19 de septiembre; los más devastadores fueron los del 7 y 19 de septiembre, que derivaron declaratorias de emergencia en 11 estados.
De estos eventos sísmicos, se identifican a cinco entidades federativas que concentran los epicentros de 85% de los sismos que rebasan los 4 grados de magnitud: Chiapas, en donde se ha ubicado el epicentro de mil 72 sismos; Oaxaca, con 523 casos; en tercer sitio está Guerrero, con 288 casos; en cuarto, Baja California Sur, con 158 casos; y en quinto sitio Jalisco, con 123 casos.
En estos estados, algunas localidades registran más de 100 epicentros: Ciudad Hidalgo, Chiapas, como epicentro de 577 casos; Salina Cruz, Oaxaca, con 177 casos; Pinotepa Nacional, Oaxaca, con 132 casos; Mapastepec, Chiapas, con 101 casos, y Pijijiapan, también en Chiapas, con 101 casos registrados.
Otras localidades con alta actividad sísmica son: Cihuatlán, Jalisco, con 91 casos; Tonalá, Chiapas, con 90 casos; Coyuca de Benítez, Guerrero, con 49 casos; Huixtla, Chiapas, con 48 casos; Matías Romero, Oaxaca, con 44 casos; Petatlán, Gro., con 43 casos; Crucecita, Oaxaca, con 43 casos; Cabo San Lucas, en BCS, con 41 casos; y San Marcos, Guerrero, con 41 casos.