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En Oaxaca, la propiedad de la tierra es un 93% de carácter social, es decir, comunal o ejidal y el resto es privado. Lo anterior genera una serie de conflictos agrarios que datan de hace más de un siglo.
De acuerdo con el gobierno estatal, a la fecha hay 339 problemas por tierras pendientes de resolver y al menos 20 son calificados como de alta conflictividad. La más reciente disputa se generó a principios de febrero y duró casi un mes, entre Santa Catarina Juquila y Santiago Yaitepec, que generó la retención de dos mandos policiacos y un bloqueo carretero.
Según estadísticas de las autoridades, en poco más de dos años del mandato de Alejandro Murat Hinojosa se han resuelto 25 asuntos, de los cuales 22 han sido consolidados mediante la firma de convenios y tres están por concretarse.
“Los conflictos agrarios son parte de la realidad de nuestro estado y por muchos años no fueron atendidos. Sin embargo, esto es relevante para el trabajo de paz y acuerdos que tiene mi gobierno”, declaró el gobernador.
Reiteró que la solución de los conflictos facilita la concreción de otros acuerdos encaminados al desarrollo de Oaxaca.
De acuerdo con la Secretaría General de Gobierno (Segego), de los 22 problemas solucionados mediante convenios, de 2017 a la fecha, seis corresponden a la región Sierra Sur, cinco a la Mixteca, cuatro a los Valles Centrales, tres a la Cuenca, tres al Istmo y uno a la Costa; en total han resultado beneficiadas 47 mil 183 personas.
El gobierno estatal destacó que en el sexenio pasado sólo se resolvieron cuatro conflictos agrarios.
Murat Hinojosa reconoció la voluntad y la disposición de las comunidades para garantizar la paz de sus habitantes y poner fin a sus conflictos, algunos de ellos con más de 70 años de antigüedad y que a su paso han dejado enfrentamientos, agresión, abandono del campo y muerte.
Uno de los asuntos más relevantes solucionados fue el del municipio San Juan Guichicovi, en la región del Istmo, con su localidad de El Ocotal, que duró 70 años, por la disputa de mil 293.55 metros lineales.
Otro que tuvo una duración de 80 años fue el que se solucionó entre San Pedro Siniyuvi y Concepción Progreso, en la Mixteca, cuyo convenio de conciliación se firmó en abril del año pasado.