Hasta las once de la mañana de este lunes, con un autobús a punto de salir hacia la capital oaxaqueña, solamente unos 100 extranjeros en tránsito habían aceptado dejar la calle y trasladarse al centro de movilidad.
Alrededor de las centrales camioneras de primera y segunda clase, ubicadas cerca del crucero principal de la ciudad y en las cercanías de las tiendas departamentales, todavía se podían observar al menos 500 migrantes de diferentes nacionalidades.
En el centro de movilidad migratoria, se habilitaron dos taquillas para la venta de boletos a la capital oaxaqueña, están formados unos cuatro autobuses, tienen servicios sanitarios y se espera que el gobierno municipal instale un módulo de atención médica.
Las autoridades migratorias, municipales y del gobierno del estado confían en que conforme los migrantes se enteren que solamente podrán adquirir sus boletos en el centro de movilidad, tendrán que acudir a ese punto del nororiente de la ciudad.