Ante crisis de basura en la ciudad de Oaxaca, nace proyecto para convertir heces de mascotas en "poposta"

Etla.— A través de la iniciativa Hagamos Composta, que promueve la separación de los residuos orgánicos y su aprovechamiento al convertirlos en composta para nutrir y abonar plantas, recientemente nació Hagamos Poposta, un proyecto que pretende aprovechar las heces de animales domésticos para producir nutrientes para plantas.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Yanin Robles, una de las impulsoras del proyecto, indica que usualmente las heces de las mascotas son desechadas en bolsas de plástico, que nunca se desintegran, lo que puede generar un foco de infección.

 

Foto: Mario Arturo Martínez

 

Hagamos Poposta se inició de manera simultánea en ciudades como Toluca, la Ciudad de México, Cuernavaca, Culiacán y Atlacomulco; no obstante, en Oaxaca cobró relevancia ante el anuncio del cierre del basurero municipal de Zaachila, que afecta a la capital del estado y a 25 municipios conurbados que hacían uso del tiradero.

 

 

Fue así como la iniciativa se convirtió en una opción efectiva para que la población dé destino final a los desechos orgánicos y las heces de sus mascotas.

 

Composta activa y  pasiva

 

Yanin Robles explica que el proyecto es diferente a Hagamos Composta, pues debido a los microorganismos que hay en las heces de los animales domésticos, el tratamiento  debe ser distinto. 

“La poposta genera una composta llamada ‘caliente pasiva’, mientras que la que se hace con residuos orgánicos es ‘composta caliente activa’”, precisa.

Mientras que la composta pasiva no puede airearse ni moverse para evitar que las bacterias se propaguen en el ambiente, la llamada activa requiere de ser constantemente removida para propiciar el paso del aire. 

Foto: Mario Arturo Martínez

“La poposta no necesita voltearse, pero tarda hasta un año en hacerse, mientras que la otra tarda más o menos seis meses”, detalla Robles.

 

 

La temperatura de la poposta es importante para la eliminación de organismos patógenos, explica, por eso tiene que ser mayor a 55 grados centígrados, de acuerdo con la NOM-004- Semarnat 2002. 

Los dos tipos de composta elaboradas en este proyecto cumplen con la norma, afirma la impulsora de la iniciativa.

Por seguridad biológica, la poposta no puede usarse en hortalizas y tubérculos, sólo en plantas como arbustos y ornamentales, a diferencia de la composta hecha con residuos orgánicos que es apta para cualquier tipo de planta.

Foto: Mario Arturo Martínez

 

¿Cómo funciona?

 

La suscripción al programa de Hagamos Composta y Poposta cuesta 350 pesos; en el caso de Hagamos Poposta, incluye una cubeta de 19 litros y aserrín. La activista precisa que la cubeta debe llenarse con cuatro o cinco centímetros de aserrín y después una capa de heces envueltas en una bolsa de papel, periódico o estraza; así sucesivamente, hasta llenarla.

La recolección es semanal, quincenal o mensual, dependiendo del número y talla de los animales domésticos de cada hogar inscrito. En el caso de los gatos, puntualiza, hay que sacudir las heces antes de depositarlas en el bote, pues no deben tener arena, debido a que ésta contiene ventonita, elemento que impide su degradación.

Foto: Mario Arturo Martínez

En el caso de Hagamos Composta, la inscripción incluye dos cubetas de 19 litros, una de cinco y una infografía para saber qué sí y qué no agregar. De las dos cubetas, una se queda en el domicilio y la otra es la que se intercambia en la recolección.

 

 

“La gente ha estado muy receptiva hacia los dos proyectos; sin embargo, Hagamos Poposta ha tenido mucha mayor respuesta a la que tuvo Hagamos Composta cuando empezamos, hace un año”, agrega.

 

Despierta interés

 

A una semana de su lanzamiento, el programa Hagamos Poposta suma casi 50 inscripciones, mientras que Hagamos Composta cuenta con 170 usuarios en la ciudad de Oaxaca y municipios conurbados.

“Un gran porcentaje de nuestros usuarios de Hagamos Composta se inscribieron también a otro programa, tenemos también usuarios nuevos”.

Foto: Mario Arturo Martínez

Yanin Robles dice que en zonas donde se detuvo la recolección de basura las inscripciones han crecido, como el municipio de San Andrés Huayapam, de donde llegan a recibir más de 20 solicitudes semanales.

El anuncio de cierre del basurero municipal de Zaachila, insiste, ha propiciado que las personas se preocupen por el destino final de su basura, buscando algunas opciones, como Hagamos Composta.

Además, el proyecto da empleo al menos a tres personas, quienes asumen distintas funciones dentro de la iniciativa.

 

“Falta educación ambiental”

 

Por otro lado, Yanin Robles resalta que en el estado de Oaxaca hay una nula educación ambiental. 

“El gobierno debería crear programas que impulsen la conciencia ambiental y aunque hay un boom para la búsqueda de opciones para el destino sustentable de los residuos, sólo 80% se interesa en la labor y el trabajo que requiere el tratamiento de la composta”.

 

 

Aunque el cierre del basurero fue anticipado por las autoridades, en el periodo de precierre los municipios exigen a las personas que separen sus restos orgánicos e inorgánicos, sin otorgar capacitación alguna para que lo hagan correctamente. 

Foto: Mario Arturo Martínez

Por esa razón, muchas personas han acudido a Yanin Robles y su equipo para solicitar asesoría.