Aún sin cuantificar daños por John en Oaxaca y emergencia por las lluvias no cede en la Costa y Mixteca
Pese a los severos daños, la emergencia está lejos de concluir, ya que la Conagua alertó sobre dos bajas presiones con potencial de desarrollo ciclónico
Juxtlahuaca.– A una semana del impacto del huracán John en territorio oaxaqueño aún no se sabe con exactitud la magnitud del desastre, ni la dimensión de los daños que su paso dejó en la entidad, pues aún no concluye el conteo de familias damnificadas, cultivos, carreteras y caminos destruidos por deslaves, derrumbes e inundaciones.
Y la emergencia aún está lejos de concluir, debido a que, de acuerdo con el pronóstico de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), existen dos bajas presiones con potencial de desarrollo ciclónico en las próximas 72 horas que podrían afectar al estado, que sumado a los suelos saturados por tanta agua, que ya no tienen capacidad de filtración, generan “una alta probabilidad” de ocurrencia de deslizamientos de tiertas y crecidas de ríos.
“Al momento se siguen evaluando las afectaciones a través de las autoridades municipales, recordemos que la ley nos dice que son ellas quienes se convierten en evaluadores de sus propios daños porque conocen sus comunidades y agencias. Ellas pasarán toda la información al Comité Estatal de Evaluación y ellos cuantificarán los daños”, explicó a EL UNIVERSAL Manuel Maza Sánchez, coordinador de Protección Civil y Gestión Integral de Riesgos (CEPCyGR).
Maza señaló que a partir de este martes se instalará el Comité Estatal de Evaluación para atender el número de afectaciones en viviendas, caminos, cultivos, infraestructuras, escuelas, agua potable y otros, los cuales se evaluarán durante tres días para después solicitar los apoyos al gobierno federal.
En tanto que se den a conocer los daños, dijo que las zonas mayormente afectadas mantendrán los refugios temporales, debido a las próximas lluvias con probabilidad de ciclón tropical. “Tenemos un fenómeno que está próximo a llegar, pasado mañana o jueves que tal vez afecte a la misma zona”, advirtió.
En caso de las familias que han perdido sus viviendas por deslizamientos de tierras o deslaves, indicó que serán las autoridades municipales quienes tendrán que reubicarlos o buscar algún espacio temporal, mientras procede la Declaratoria de Desastre. “Es una función netamente municipal, no del estado, para eso son los planes municipales de contingencias. Pero muchas autoridades hacen caso omiso a los temas de Protección Civil y tienen instalados sus consejos, pero no se declaran en sesión, no sesionan, no tienen actas, pero lo que sí tienen es una gran responsabilidad”.
Hasta el momento en Oaxaca ya suman 65 los municipios que han solicitado la Declaratoria de Desastre: 33 en la Costa, 21 en la Sierra sur y 11 en la Mixteca, mismos que podrían ser nuevamente afectados por las intensas lluvias en las próximas horas; las agencias, barrios y colonias de los municipios con mayor daño son Villa de Tututepec, Santiago Jamiltepec y Santiago Pinotepa, en la región Costa.
Algunas sufrieron inundaciones fluviales con desbordamiento de los ríos y otras inundaciones pluviales por la caída de tanta agua durante seis días, “derivado de esta gran cantidad agua que permaneció durante tantos días tuvieron reblandecimiento de suelos y como consecuencia flujos de lodo, derrumbes, deslizamiento de algunas laderas y por ello se pidió la declaratoria en los municipios ubicados en las zonas alta y los que están en el cono de las afectaciones de este fenómeno”, dijo el coordinador de PC.
Por estas afectaciones, hasta este lunes varias comunidades de la Sierra Sur, Mixteca y Costa seguían incomunicadas y con paso intermitente en carreteras federales como el caso de la 125 “Alfonso Pérez Gasga” que presenta al menos una docena de deslaves y deslizamientos el tramo que conduce de Tlaxiaco a Putla de Guerrero y Santa María Zacatepec.
De acuerdo con el pronóstico del tiempo emitido por la Conagua, las bajas presiones con potencial para desarrollo ciclónico, una frente a Guerrero y la segunda frente a Chiapas, se encuentran inmersas a la “vaguada monzónica”, perpetuando así las condiciones climáticas inestables en la entidad.