Entre silencio y angustia, sepultan a Wilfrido Atanacio, víctima de la emboscada en Petapa
Ante los retenes realizados por grupos involucrados en el conflicto agrario, pobladores reportan escases de víveres y medicinas; piden ayuda al gobierno

Juchitán, Oax. – En un ambiente de silencio reprimido por la tensión y la angustia, hoy fue sepultado el cuerpo de Wilfrido Atanacio Cristóbal, en la comunidad de San Isidro Platanillo, asesinado el pasado jueves 13, junto con dos más de sus compañeros.
La Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (UCIZONI), informó que los cuerpos de dos de sus militantes, Victoriano Quirino y de Abraham Chirino, asesinados en una emboscada el jueves 13, fueron inhumados ayer sábado en Matías Romero.
Debido a que es deficiente la señal de telefonía en la franja fronteriza entre Santo Domingo Petapa y San Juan Mazatlán Mixe, algunos vecinos quienes pidieron el anonimato denunciaron mediante mensajes, que la comunidad de Platanillo está cercada e incomunicada.
Las 10 pequeñas tiendas de abarrotes que hay en la población, ya agotaron sus víveres desde el 11 de este mes, llevamos seis días incomunicados porque los asesinos tienen bloqueado el paso a Guichicovi, desde el poblado El Zapote, de Santo Domingo Petapa, denunciaron.
Para mañana, los maestros de preescolar, primaria, telesecundaria, y del Bachillerato del IEEBO, que abandonaron la población desde el 11 de febrero, no podrán regresar a clases porque el paso sigue cerrado.
De igual forma, advirtieron, los médicos y enfermeras que atienden las clínicas del IMSS-Bienestar de la zona no estarán en condiciones de ingresar a las comunidades porque los pistoleros del llamado Grupo de los 33, dijeron que no los dejarán pasar.
No tenemos víveres y tampoco medicinas y nadie de la población, estimada en dos mil personas, está saliendo a realizar sus actividades por temor a las emboscadas. Queremos, reclamaron, que el gobierno de Oaxaca y de México, manden a sus policías a brindar la seguridad.
El conflicto agrario, explicaron, es entre Santo Domingo Petapa y San Juan Mazatlán Mixe, pero nosotros que somos de Petapa nos están matando los mismos paisanos de Petapa porque nos negamos a involucrarnos en ese problema que lleva más de 53 años.
Solo queremos que el gobierno mande policías para cuidar la seguridad, para que lleguen los víveres y las medicinas, hay mucha gente enferma, queremos que abran el paso, que liberen los retenes para que entren los maestros y los niños tengan clases, pidieron.