Historia de Impunidad: a 4 años del asesinato de su hija, Soledad Jarquín sigue sin obtener justicia para Sol

Por el caso del asesinato en 2018 de María del Sol Cruz Jarquín hay seis carpetas de investigación activas y nulos avances

Historia de Impunidad: a 4 años del asesinato de su hija, Soledad Jarquín sigue sin obtener justicia para Sol
Foto: Edwin Hernández
Estatal 29/05/2022 08:57 Christian Jiménez Actualizada 08:57

Desde hace cuatro años, la risa de María del Sol Cruz Jarquín ya no resuena en los pasillos del hogar que compartía con su madre y sus hermanas. El 2 de junio de 2018 fue asesinada en Juchitán de Zaragoza; las balas apagaron la felicidad de su familia, que hasta hoy persiste en la exigencia de justicia.

Soledad Jarquín Édgar, periodista y defensora de los derechos humanos, ha pasado cuatro años de puerta en puerta, pidiendo justicia para la menor de sus hijas; sin embargo, hasta el momento no hay avances en el caso ni en ninguna de las carpetas de investigación que se iniciaron por éste.

El 24 de noviembre de 2020, Jarquín Édgar viajó a la Ciudad de México y asistió a una de las conferencias matutinas del presidente Andrés Manuel López Obrador; ahí le recordó al mandatario que la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) no avanzaba en el caso.

 

 

El Presidente pidió a la entonces secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, que atendiera personalmente el tema, pero no fue así.

“Esa gente se olvidó del compromiso, sobre todo la gente de Gobernación, Olga Sánchez Cordero recibió la instrucción directa del Presidente de atender el caso y lo que hizo fue turnar la instrucción a la titular de Conavim, Fabiola Alanís”, recuerda Jarquín Édgar en entrevista con EL UNIVERSAL.

Entre la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), Soledad Jarquín, abogadas y defensoras del caso, hubo, desde 2020, ocho reuniones con resultados nulos.

Lo único que pedían, acota la periodista, era que la Fiscalía General de la República (FGR) atrajera el caso de María del Sol Cruz, pues desde que inició la investigación en Oaxaca encontraron obstrucciones en el acceso a la justicia.

Fabiola Alanís se comprometió a plantear el caso al fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, lo que hizo, pero nunca de manera formal.

Desde entonces, tanto ella como el equipo de mujeres abogadas y defensoras que la acompaña, decidieron dejar de insistir a la federación.

Quienes conocieron a María del Sol Cruz la recuerdan como una joven alegre, feliz, compasiva y dispuesta a ayudar, ya sea en sus múltiples empleos en fotografía, atendiendo una panadería en sus horas libres o llevando comida a familiares de pacientes en el Hospital Civil.

Era una fotógrafa en crecimiento, que antes de ser asesinada fue designada como jefa de Comunicación Social en la Secretaría de Asuntos Indígenas (SAI), que entonces estaba a cargo de Francisco Montero.

Fue él quien condicionó el trabajo de la joven a cambio de enviarla a cubrir la campaña política de su hermano, el priista Hageo Montero López, quien aspiraba a convertirse en edil de Juchitán de Zaragoza

La madrugada del 2 de junio de 2018, antes de que María del Sol Cruz cumpliera 27 años, fue asesinada  junto con Pamela Terán, candidata del PRI a segunda concejal de Juchitán y Adelfo Guerra, su chofer.

 

 

Datos del Grupo de Estudios Sobre la Mujer Rosario Castellanos (GES Mujer) señalan que en ese año fueron asesinadas 123 mujeres de manera violenta en Oaxaca; mientras que en la administración actual suman, hasta el 19 de mayo de 2022, 653 casos. De éstos, 53 han sucedido en el año en curso.

El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública indica que en 2018 se registraron 834 feminicidios en México, de los cuales 29 sucedieron en Oaxaca. Se suman 96 casos de homicidio doloso y 146 de homicidio culposo.

 

Sin descanso

 

Soledad Jarquín no desiste de su exigencia de justicia. En noviembre pasado, el fiscal local Arturo Peimbert Calvo le informó que la carpeta por el homicidio de su hija sería cerrada parcialmente; con ello, el único detenido por el caso quedó en libertad y la fiscalía inició una nueva carpeta por feminicidio.

El funcionario prometió armar una investigación con todos los elementos necesarios para la captura y sanción de los responsables. A seis meses de iniciada la carpeta y después de cuatro reuniones con Peimbert, no se han reportado avances.

Por el caso de María del Sol hay seis carpetas de investigación activas: una por feminicidio que se inició recientemente; por delitos electorales cometidos por los hermanos Montero; por el robo del equipo de trabajo en el que María del Sol guardaba evidencia de su trabajo y de la campaña política en la que fue obligada a trabajar, cometido por un empleado de la SAI.

También hay una carpeta en el Tribunal de Justicia Administrativa por el delito de corrupción; una contra los hermanos Montero por uso de recursos públicos y otra contra Rubén Vasconcelos y Araceli Pinelo, por obstrucción de la justicia.

La periodista y activista detalla que la carpeta por delitos electorales no muestra avances desde que se inició, por lo que tendrá que acudir ante el Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (IEEPCO) para preguntar en persona.

Desde mayo de 2021, tampoco hay avances de la que se inició por corrupción, cuando se fijaron sanciones para los hermanos Montero, incluida una pena económica para Hageo Montero por 90 mil pesos, quien culminó una administración como regidor en Juchitán, cargo que asumió sin contratiempos a pesar de las investigaciones en su contra.

Tras lo sucedido, se generaron 11 puntos de acuerdo, llamadas, solicitudes que se giraron al gobierno de Oaxaca y Gertz Manero para que atrajera el caso, el planteamiento de una reunión con el fiscal en el Congreso local e, incluso, una intervención que hizo el entonces senador Salomón Jara Cruz, pero la solicitud no ha sido atendida.

 

 

Asimismo, hay una veintena de llamados realizados por organizaciones oficiales, comisionados y representantes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), pronunciamientos de organismos internacionales y de embajadas como la de Canadá; a pesar de ello, el caso continúa en la opacidad.

“Es sorprendente la poca atención y la nulidad que le dan a los casos”, acota Soledad Jarquín, quien mira el rápido transcurrir del tiempo desde que la ausencia de su hija se hizo permanente; sin embargo, es en su recuerdo donde encuentra fuerzas para continuar convocando a las personas a conocer el caso y a las autoridades para procurar justicia para Sol.

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