Impiden instalación de casillas en Los Chimalapas y San Mateo del Mar, comunidades indígenas de Oaxaca
Mientras los habitantes de Santa María Chimalapa combaten un poderoso incendio forestal que devora la selva y piden ayuda de autoridades, los ikoots exigen liberar a los detenidos acusados de la masacre de Huanzantlán de 2020
Juchitán.– Tal y como estaba previsto, en Santa María Chimalapa, comunidad zoque del Istmo de Tehuantepec, no se instalaron las casillas para la elección presidencial. La población de la cabecera y de algunas agencias cercanas están combatiendo el incendio forestal del centro al norte de la selva.
Ayer, el helicóptero de la Defensa Nacional (Sedena) trasladó a los primeros 50 comuneros voluntarios que estarán tres días en el combate y después serán relevados.
Cada campesino lleva en los hombros o espalda sus totopos, agua y porciones de frijoles refritos.
El incendio que surgió desde el 24 de mayo, está siendo combatido por unas 300 personas, entre brigadistas y voluntarios y apenas tiene 40% de liquidación. “Es necesario el apoyo aéreo para que descargue agua”, dijeron.
Mientras que los comuneros fueron reemplazados ayer, pidieron a los pueblos vecinos que ayuden con alimentos enlatados y agua, mucha agua, porque allá arriba el calor es infernal. “Esperamos que nos manden la ayuda o que digan dónde podremos ir por las despensas”.
Por otro lado, los comuneros alertaron sobre el surgimiento de un nuevo incendio cerca de la población sobre el paraje El Carrizal. Se formó una brigada de comuneros voluntarios y desde temprano se desplazaron al sitio.
En Huazantlán no se votó
En tanto que en la comunidad ikoots de Huazantlán del Río, del municipio de San Mateo del Mar, tampoco se instaló la casilla, a petición de los pobladores quienes exigen la libertad de tres de sus paisanos y que se cancelen más de 120 órdenes de aprehensión.
Los detenidos están vinculados por las autoridades por la masacre que ocurrió en junio de 2020, cuando fueron asesinadas 16 personas de esa localidad. Ese hecho generó un ambiente de permanente tensión entre los pobladores.
