Pobladores afro de Oaxaca exigen ejecutar 42.5 mdp destinados por la Federación para “Afrouniversidad”
Los recursos para la creación de la Universidad Politécnica Afromexicana se habrían asignado de forma oficial por parte de la SEP el pasado 26 de enero, luego de publicarse en el Diario Oficial de la Federación
Oaxaca de Juárez.— Habitantes de pueblos afrodescendientes de Oaxaca exigieron al gobierno estatal aplicar de manera inmediata más de 75 millones de pesos que le entregó la Secretaría de la Educación Pública (SEP) para la creación de una Afrouniversidad, de acuerdo con información de Luciano Concheiro, subsecretario de Educación Superior del gobierno de México.
Lo anterior fue parte del resolutivo alcanzado durante el XXIII Encuentro de Pueblos Negros Afromexicanos o Afrodecendientes, evento donde el funcionario federal dio a conocer la liberación de dichos recursos para la construcción de la Afrouniversidad, misma de la que no hay ningún indicio.
La asignación de esos recursos se oficializó el pasado 26 de enero, luego de publicarse en el Diario Oficial de la Federación, mismos que se etiquetaron para la creación de la Universidad Politécnica Afromexicana.
Según la publicación, la Federación destinó al gobierno de Oaxaca 75 millones 485 mil 787 pesos, presupuesto que por reducciones fiscales quedó finalmente en 42.5 millones de pesos.
Luego de que el subsecretario informó la existencia de dichos recursos a los pobladores, la asamblea señaló que el gobernador Alejandro Murat se comprometió a ejercer este recurso antes de que terminara su administración, lo cual no ha sucedido.
Ante ello, Rosy Castro, activista en pro de los derechos de los afromexicanos, aseguró que se debe cuestionar al gobernador sobre el destino del recurso.
“Ya no nos vamos a quedar callados. Las autoridades le apuestan a nuestra pasividad, pero si es necesario movilizarnos por nuestra afrouniversidad, lo haremos”, señaló la activista durante el encuentro de pueblos negros.
Según los acuerdos del encuentro, la “afrouniveridad” fue proyectada como una forma para saldar la “deuda histórica” con el pueblo afromexicano que habita en la costa oaxaqueña, “quienes en reiteradas ocasiones han denunciado ser víctimas de discriminación”.
