Suma Defensoría de Oaxaca 474 quejas en dos años por abuso policial durante alcoholímetros
Tras las quejas recibidas, la Defensoría oaxaqueña puso en marcha una estrategia de vigilancia y atención a la ciudadanía en el operativo alcoholímetro
La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) puso en marcha una estrategia de vigilancia y atención a la ciudadanía, por la aplicación del operativo alcoholímetro.
Lo anterior porque entre enero de 2020 y agosto de 2022, la DDHPO ha recibido 474 quejas relativas a actuaciones que pudiesen configurar abuso policial en toda la entidad, durante esos operativos.
Ante ello, personal especializado llevó a cabo, la noche del viernes y madrugada de sábado, procesos de observación y recorridos en Santa Lucía del Camino y Santa Cruz Amilpas.
El equipo, encabezado por el ombudsperson oaxaqueño, Bernardo Rodríguez Alamilla, se entrevistó con los mandos policíacos responsables de estas actividades, así como con personas que fueron resguardadas en este marco.
También, un equipo de visitadores acudió al centro de detención de Santa Lucía del Camino, donde se observaron las condiciones en las que se encuentran las personas que son referidas al mismo.
El defensor de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca apuntó que este tipo de estrategias tiene por objeto desincentivar violaciones a derechos humanos que pudiesen registrarse en el marco de estas actividades.
Y es que, dijo, las autoridades municipales de todo el estado, y en específico sus policías, se encuentran entre las principalmente señaladas de incurrir en actos contrarios a los principios de dignidad de las personas.
En este sentido, Rodríguez Alamilla sostuvo que, bajo un nuevo paradigma de actuación, la Defensoría no espera únicamente a recibir solicitudes de intervención, sino que principalmente busca inhibirlas y atender a las personas de manera directa.
Aseguró que, si bien, la Defensoría es respetuosa de las facultades de las autoridades y entiende la importancia del alcoholímetro como un mecanismo de prevención de accidentes, es deber de la institución vigilar que las medidas que se realizan, se lleven a cabo bajo los protocolos correspondientes y con respeto a los derechos humanos.
El ombudsperson oaxaqueño resaltó la urgencia de establecer procesos de formación, sensibilización y acreditación de los elementos municipales, así como fortalecer los controles de confianza y profesionalización de los elementos, para beneficio conjunto de la sociedad.
Finalmente, indicó que las brigadas de defensores continuarán realizando recorridos en operativos de alcoholímetro, de manera periódica y sorpresiva, en los distintos municipios del estado donde se implementan estas acciones.
