Ante ello, decenas de personas alistaron, y muchas de ellas, vistieron a sus mascotas para que participaran este día, en la celebración eucarística.
De acuerdo con los vecinos de la zona, la tradición comenzó hace muchos años, en este mismo templo, a donde las familias llevaban sus yuntas, gallinas y animales de trabajo para que recibieran la bendición y con ello, llegara la abundancia a sus hogares.
Aunque la tradición es conocida en la capital del estado, éste es el único templo donde la tradición perdura.
Aunque la lluvia llegó en medio de la bendición, minutos antes, las personas levantaban en brazos a sus mascotas para que les tocara agua bendita de la ceremonia religiosa.
Vestidos de luchadores, con vestidos, suéteres, disfraces o simplemente correas, decenas de animalitos, considerados integrantes de sus familias, recibieron la bendición este jueves.
