Interponen denuncia por el delito al templo de San Agustín
Las pintas han aumentado en los últimos años y diariamente aparecen graffitis en los inmuebles del Centro Histórico de Oaxaca
Después de las pintas hechas al templo de San Agustín, edificado en el siglo XVI en el Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca, el personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) interpuso una denuncia penal por el delito de daño patrimonial ante la Procuraduría General de la República (PGR).
Fernanda Martínez Camacho, restauradora del INAH Oaxaca, explicó que a una semana de las afectaciones aún continúan con el diagnóstico del inmueble para elaborar un proyecto de intervención, en el cual definan el proceso y el recurso económico a utilizar.
“Ahorita estamos todavía en la conformación del expediente, ya tenemos la denuncia presentada, se están conformando los expedientes para cuantificar los daños”, señaló.
Sin embargo, detalló, la restauración de este monumento histórico será hasta que se lleven a cabo los peritajes por parte de la PGR y existan las condiciones de seguridad en la zona para evitar que el inmueble vuelva a ser vandalizado.
El templo de San Agustín, ubicado a una cuadra del Zócalo de la Ciudad de Oaxaca, fue pintarrajeado por personas desconocidas el 5 de abril; en este espacio constantemente se concentran grupos de indigentes y la calle de Armenta y López en la que se sitúa está cerrada al tránsito por los profesores de la Sección 22 adherida a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), quienes tienen su edificio sindical en esa área.
Pero las pintas no solo se han presentado en este inmueble sino en más monumentos con valor patrimonial, la mayoría religiosos como el emblemático templo de Santo Domingo de Guzmán, la Catedral, los edificios de San Felipe Neri, San Cosme y San Damián.
La especialista explica que este fenómeno de pintas ha aumentado en los últimos años y diariamente aparecen graffitis en los inmuebles del Centro Histórico, lo que dificulta tener una cifra precisa de los edificios afectados por pintas desde consignas sociales, hasta manifestaciones artísticas.
“Las pintas amanecen todos los días, no solo pintas en las fachadas, sino por todos lados, esto va más allá de un graffiti en una puerta de un templo, es una problemática mucho más grave… el Centro Histórico está teniendo muchas afectaciones por pintas”, detalló.
Ante este fenómeno, el personal del INAH consideró urgente que los tres niveles de gobierno establezcan políticas públicas para sensibilizar a la población sobre la importancia del cuidado del valor patrimonial a fin de evitar más daños, además de garantizar la seguridad en el Centro Histórico de la capital.
akc