La falta de recolección de basura es una bomba de tiempo, aseguran comerciantes de la Central de Abasto, que custodian la zona de la rampa a donde llegan vendedores a depositar sus desechos, tras el bloqueo ayer al tiradero de desechos ubicado en la Villa de Zaachila.

Desde la mañana de este sábado, los líderes de la zona de compra y venta más grande de la capital oaxaqueña, solicitaron a los agremiados la vigilancia permanente de la zona, para evitar que camiones lleguen a descargar basura.

“Nos enteramos desde la mañana que no va a venir el camión y queremos pedirle al gobernador Alejandro Murat, que solucione el problema con la gente del tiradero, porque es imposible que aquí quepa tanta basura”, expresó una de las mujeres que cuida el sitio.

Explicó que son por lo menos 16 mil comerciantes los que acuden al lugar a dejar sus desechos, sin embargo, hay camionetas que descargan la basura de las colonias en el sitio, sin la autorización de los vendedores, lo que agrava la situación.

El problema, agregó, es que en caso de lluvias, el agua podrida se escurre y llega hasta los puestos.

Las ventas este sábado en la Central de Abasto se vieron afectadas por las comisiones de vigilancia, para las que, los comerciantes tuvieron que dejar solos sus puestos.

“Nosotros estamos aquí cuidando el montón de basura, mientras las autoridades, a quienes les compete la solución de esto, están muy a gusto descansando”, manifestó una de las empleadas de un puesto de verduras, ubicado al interior del mercado, al frente de una pila gigante de basura, que sigue creciendo a medida que alcanzan las horas.

Las soluciones no se ven próximas, para los que trabajan en la Central, el que durante la toma del basurero el mes pasado, se haya recurrido a colocar los desechos en las riberas del Río Atoyac, fue una medida acertada.

Hoy, la situación es distinta porque donde se improvisó el tiradero a cielo abierto, fue ocupado por puestos de tomateros y venta de alimentos; no hay otra alternativa más que vigilar durante todo el día el sitio de descarga para impedir que personas ajenas quieran tirar su basura, indicó otro líder.

El viernes, pobladores de la agencia Vicente Guerrero y las 33 colonias unidas, volvieron a cerrar el basurero municipal ubicado en inmediaciones de Zaachila, para exigir al gobierno local la atención a la zona, luego del desalojo de los integrantes de la organización Frente Popular “14 de Junio”.

Los habitantes de la demarcación piden la detención y sanción de los líderes del grupo mencionado, así como la vigilancia permanente en la zona, que ha quedado en riesgo. Tras los enfrentamientos suscitados en el mes de julio, el basurero se mantuvo cerrado por más de una semana, acumulando 80 mil toneladas en las riberas del Atoyac.

Apenas ha transcurrido un día desde el cierre y las calles del centro y la zona de la Central, empiezan a llenarse de basura; el tiradero recibe 750 toneladas de desechos al día.