Pandemia redujo ingresos propios de municipios y obliga a cambios fiscales; crisis por falta de pagos, la consecuencia

Juchitán de Zaragoza.— Los ingresos propios de los gobiernos municipales del Istmo de Tehuantepec registraron drásticas caídas como consecuencia de la  pandemia de Covid-19, admiten los presidentes  del puerto de Salina Cruz y de la ciudad zapoteca de Juchitán de Zaragoza.

“Por la falta de dinero, no pudimos economizar, ni siquiera para garantizar el pago de aguinaldos”, reconocen los ediles por separado a EL UNIVERSAL. 

Ambos munícipes emanados del partido Morena, Juan Carlos Atecas Altamirano, de Salina Cruz, y Emilio Montero Pérez, de Juchitán, protagonizaron al lado de otros ediles, como el San Blas Atempa, el también morenista Antonino Morales Toledo, una serie de bloqueos sobre la carretera Panamericana, que comunica al Istmo con la capital, para solicitarle al gobierno oaxaqueño, de extracción priista,  un préstamo para cubrir el pago del aguinaldo. 

La respuesta estatal fue negativa. La Secretaría General de Gobierno informó que era imposible disponer de los 300 millones de pesos que solicitaban 33 municipios para ayudarse a sanear sus finanzas públicas, y les recordó a los ediles que el manejo de sus recursos es una responsabilidad municipal.  

Ante dicha respuesta, ambos ediles aseguran que hace un año  no tuvieron problemas económicos ni para el pago del aguinaldo, y tampoco para cubrir las deudas con los proveedores. 

Ahora, coinciden, con la experiencia aprendida  este 2020,  se tendrán que modificar las políticas fiscales y financieras  municipales para el año que recién  comienza. 

Cayó recaudación

Foto: Especial

El gobierno municipal de Juchitán dejó de percibir entre 10 y 15 millones de pesos por la pandemia. Lo anterior, dado que cayó la recaudación de los ingresos prediales, así como los pagos por concepto de  licencia de funcionamiento de empresas cerveceras, y espacios como  salones de fiesta.

Además, la tesorería suspendió cobros  a  comerciantes ambulantes y semifijos, pues a ellos también se les desplomaron las ventas. 

A esta situación se sumaron los recortes a los recursos federales que se destinan de forma directa a los municipios, ante la política de austeridad que impulsa el gobierno federal por la crisis. 

“Para el año entrante, los 2 mil 458 municipios del país van a sufrir recortes significativos aprobados por los diputados federales,  en el caso de Juchitán, dejaremos de percibir unos 5  millones de pesos, es decir,  será menos de lo que nos dieron en este 2020”, dice el alcalde juchiteco, Emilio Montero Pérez.  

Pese a ello, el edil reconoce que en este año que recién terminó,  al pueblo juchiteco le fue “muy bien con las inversiones federales.” 

Lo anterior dado que,  entre los programas sociales de la 4T y el Programa Nacional de Reconstrucción para atender inmuebles dañados por el terremoto  de 2017, les asignaron mil 200 millones de pesos, más 190 millones del Programa de Mejoramiento Urbano, de la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano (Sedatu). “Saldremos adelante”, dice.

Reclamos en el puerto

“A nosotros  nos fue peor porque, además de la caída de nuestros ingresos, fuimos afectados por el daño patrimonial que realizaron los expresidentes al incrementar los salarios de los funcionarios sin que tuvieran méritos,  y porque los regidores priistas se han negado a modificar la Ley de Ingresos”, denuncia Juan Carlos Atecas Altamirano, presidente municipal del puerto de  Salina Cruz. 

En el caso de este municipio, la caída de  los ingresos propios   provocó que  no pudiera cumplir con los pagos de fin de año, lo que ocasionó un paro laboral de policías municipales, quienes reclaman el pago de 45 días de aguinaldo.

Salina Cruz también tiene recursos del Programa de Mejoramiento Urbano (PMU) de Sedatu, por  300 millones de pesos; sin embargo, explica el edil, mientras la población crece cada año, la economía del puerto no lo hace, y sin crecimiento económico el dinero no alcanza para cubrir las necesidades de los habitantes, señala.

“Estamos conscientes que por la pandemia en 2021 tendremos menos recursos federales, pero modificaremos nuestras políticas públicas para que  evitemos los problemas de  este 2020”, asegura.

Entre las medidas que ambos municipios tomarán, adelantan, está la reducción en gastos fijos como gasolina y papelería, así como descuentos en predial y licencias de negocios, para  captar  más recurso. Ambos aseguran que no habrá aumento de impuestos.