Bloquean constructores carretera y alumnos toman dependencias en el Istmo

A dos años del sismo de 7 de septiembre, las obras no han concluido, ni se han entregado los pagos correspondientes

Foto: Roselia Chaca/ EL UNIVERSAL
Municipios 03/09/2019 11:48 Roselia Chaca Juchitán Actualizada 16:56

Esta mañana, integrantes del conglomerado Constructores Oaxaqueños del Istmo de Tehuantepec bloquearon la carretera federal en Juchitán para exigir el pago de lo invertido en las obras de construcción en escuelas afectadas por el sismo del 7 de septiembre del 2017. 

Según los manifestantes, después de un peregrinar entre diversas instancias federales y estatales, como lo son el Instituto Oaxaqueño Constructor de Infraestructura Física Educativa (Iocifed) y el Instituto Nacional de Infraestructura Física Educativa (Inifed), los manifestantes reclaman que no se han dado respuestas favorables sus peticiones. 

Demandan que se expidan contratos para los proyectos de reconstrucción iniciados con recursos propios, por órdenes de los directivos de Iocifed. Además de regularizar los pagos al personal subcontratado por Grupo Constructor Salcedo, saldar las deudas de sus directores responsables, y normalizar los pagos de las obras asignadas, que desde hace más de 6 meses no se realizan.   

Argumentaron que sus quejas han sido expuestas en diversas mesas de trabajo, sin que hasta el momento existan soluciones para recuperar su patrimonio, el cual asciende a casi 20 millones de pesos

Estudiantes se suman a protestas

De manera paralela, alumnos, padres de familia y trabajadores de la Secundaria Técnica número 50 tomaron las instalaciones del edificio de Recaudación de Rentas en Juchitán, y suspendieron clases por segundo día para protestar por las obras inconclusas en su institución, a dos años del sismo. 

La delegación sindical D-II-27 respalda a los padres de familia e integrantes de esta institución en su jornada de lucha, por la devastación del terremoto que dejó colapsado el inmueble, y mantuvo más de un año a los alumnos de dos turnos sin aulas, tomando clases debajo de lonas y árboles. 

La exigencia que mantienen es que se concluyan los trabajos en su plantel: la instalación eléctrica de las aulas, terminar la construcción de un taller, el laboratorio, 2 salones de clase, un módulo de servicios sanitarios; así como proveer del equipamiento y mobiliario necesario. 

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