Olvidado, Santa María Guienagati; también hay daños
Santa María Guienagati, que no supera a las dos mil personas, espera pacientemente que las autoridades dirijan la mirada hacia la comunidad, así como otras que fueron afectadas
Recién recuperada del susto, Silvia Martínez Valencia, regidora de Educación de Santa María Guienagati, se ha dado a la tarea de recorrer municipios para pedir apoyo a la localidad, también afectada por el sismo del pasado jueves, y que aún no recibe la visita de las autoridades estatales y federales.
"Se cayeron las casas de mis vecinos, al menos unas ocho casas, otras más sufrieron daños importantes, tal vez no es mucho como en otros lugares pero es nuestro pueblo" asegura la mujer que sobrepasa los 60 años y que al igual que otras, ocupa el cargo por primera vez en la localidad.
En compañía de su esposo, esperan pacientemente que el presidente municipal de Ciudad Ixtepec les reciba para plantearles la situación y pedir apoyo, aseguran que harán lo mismo en otros municipios hasta conseguir ayuda para sus paisanas y paisanas.
Mientras tanto, cuenta cómo su pueblo, que no supera a las dos mil personas, espera pacientemente que las autoridades dirijan la mirada hacia la comunidad, así como otras que fueron afectadas, y tal vez por ser poco conocidas no han contado con la presencia de funcionarios estatales y federales que han desfilado por la región que resintió en mayor medida las consecuencias del sismo del pasado jueves.
"Queremos un poco de despensas, apoyo para nuestras casas, pero más queremos sentir que importamos, la comunidad está asustada aún y nos gustaría que alguien nos escuchara por lo menos", dice con semblante sereno asegurando que esperaría a ser atendida.
Al final del recorrido por el municipio, que de acuerdo con las autoridades tiene mil 200 casas afectadas de forma grave, en las colonias lejanas al centro, Silvia Martínez comenta decepcionada que el presidente Félix Serrano no la quiso siquiera recibir, pese a que minutos antes se había comprometido a apoyar sin ningún tipo de distinción a quienes fueron afectados por el sismo de 8.2 grados del día jueves, y que mantiene en alerta a la población istmeña.
Mientras tanto, en Asunción Ixtaltepec la infraestructura sufrió mayor daño, de acuerdo con las autoridades el 80 por ciento de las casas sufrieron daños, en cada calle hay por menos dos casas con grietas y otras dos más con daños irreparables.
El palacio municipal no aguantará el impacto de otro sismo de magnitud similar a la del jueves pasado, tampoco la población que temerosa salió corriendo del albergue habilitado en lo que antes fue el Seminario ante una réplica registrada después de las dos de la tarde.
El espacio recibe de 800 a 900 personas diarias en donde se alimentan y pueden pernoctar, aunque debido a las condiciones del edificio la población se siete más segura en las calles.
Para la familia Morales Piñón, originaria de Asunción Ixtaltepec, la pérdida de su patrimonio duele, duele recordar el momento en el que la pilar de la familia casi pierde la vida al quedar atrapada en los muros de su casa, justamente el día en que cuenta no dejo prendida su veladora.