Con clausura de Conagua, pueblos zapotecos exigen cumplir con acuerdos sobre uso de su agua

Oaxaca de Juárez.— Bajo el llamado “Todos Unidos en Defensa del Agua”, integrantes de la Coordinadora de Pueblos Unidos por el Cuidado y Defensa del Agua (Copuda) marcharon esta mañana desde el parque El Llano hacía las oficinas de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) delegación Oaxaca, en la capital, para exigir el cumplimiento de los acuerdos firmados el pasado 12 de octubre de 2019.

Hace un año, tras una consulta indígena de cuatro etapas en la región de los Valles Centrales, 16 pueblos zapotecos de esta región alcanzaron el derecho de gestionar su agua, mismo que se formalizaría mediante un decreto presidencial, que contemplaría los temas tratados en la consulta.

“Se va a formalizar al más alto nivel. Se debe analizar quiénes solicitan el agua y por qué, de manera justa para las comunidades”, dijo hace un año Blanca Jiménez Cisneros, directora General de la Conagua,  en entrevista con EL UNIVERSAL. 

Doce meses después, las poblaciones aglutinadas en la Copuda denuncian el incumplimiento de acuerdos de la dependencia con autoridades y habitantes de estas localidades indígenas, pues no se ha concluido el proceso que les garantice el derecho a cuidar y administrar el líquido y el manejo comunitario de los recursos naturales. 

Desde agosto pasado, Copuda  se manifestó para denunciar que Conagua ha incumplido con el compromiso de emitir un nuevo decreto para garantizar el derecho humano al agua de estas 16 comunidades zapotecas.

Foto: Edwin Hernández

Los acuerdos que fueron suscritos por representantes de las comunidades en 2019, derivan de un juicio tramitado ante el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, tras el que se ordenó a la Comisión iniciar un procedimiento de consulta a comunidades y pueblos indígenas para atender el problema de la escasez de agua que los aqueja desde hace 15 años, mismos en lo que se han mantenido en lucha. 

En 2005, los pozos se secaron en cuando dejó de llover en los Valles Centrales, por lo que los pobladores recurrieron a bombas para extraer agua, pero el uso excesivo de electricidad llamó la atención de autoridades que enviaron “cartas invitación” para pagar por el servicio.

Fue entonces que comenzó la lucha por la armonización de leyes y tratados internacionales para reconocer los derechos  de las comunidades sobre su territorio, así como establecer normas y para ello.

Como resultado de ello Conagua debe establecer un nuevo decreto que incluya la zona reglamentada, así como la publicación de un estudio técnico en el que se establezca la disponibilidad de agua en el acuífero y la emisión de concesiones colectivas.

Foto: Edwin Hernández

No obstante, a un año de la firma de dichos acuerdos la dependencia federal no los ha cumplido por lo que la mañana de este lunes las comunidades zapotecas marcharon hasta sus oficinas y las clausuraron de forma simbólica cargando mantas con mensajes como: “consulten, escuchen, respeten, cumplan” y “Conagua, no más mentiras”. 

La exigencia de las comunidades es tener una audiencia con el presidente Andrés Manuel López Obrador para exponer el incumplimiento de las dependencias, además de Conagua, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). 

“Queremos decirle a la sociedad entera que este moviendo ha tenido paciencia, y que este mensaje le llegue al Presidente de la República, que tenemos paciencia pero queremos evidenciar la falta de compromiso de la Conagua con este movimiento, que ha trabajado arduamente y están recuperando el acuífero 2025 y son ejemplo para cientos de comunidades de Valles Centrales y más allá de México, de cómo los campesinos han sido responsables y han dado un ejemplo a todo el país”, señaló Carmen Santiago, directora de Flor y Canto A. C. 

Esta organización ha acompañado durante estos 15 años la lucha de los pueblos zapotecos y su trabajo comunitario para enfrentar la sequía y salvar su acuífero mediante la construcción de sus propias obras de captación de lluvia, lucha que les ha dado el título de “sembradores de agua”.