En Juchitán, encuestadores trabajan pese al miedo
En cuatro días encuestadores que recorren la ciudad fueron víctimas de un ataque armado y un asalto
"Estamos trabajando con mucho miedo, pero no tenemos otra opción. No hay empleos en el Istmo y debemos aprovechar cualquier oportunidad”, dice Xhunaxhi Guadalupe Gallegos, ingeniera en Gestión Empresarial y actual integrante de una de las brigadas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), que participa en el Censo de Población y Vivienda 2020 en esta ciudad zapoteca.
El miedo está presente entre los 101 encuestadores del Inegi desde que empezaron su labor en esta ciudad, considerada uno de los focos rojos de la inseguridad en la entidad y que según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), registró 71 homicidios en 2019.
Desde el 9 de marzo ese temor nos es gratuito, pues Mauricio, uno de sus compañeros, fue atacado a balazos cuando realizaba una visita censal en la colonia Magisterio Democrático. El miedo creció aún más luego de un asalto a mano armada a siete encuestadores, apenas tres días después.
“Claro que estamos trabajando con mucho miedo”, admite Porfirio Díaz, licenciado en Contaduría y Administración de Empresas, egresado de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO), quien recorre las calles vacías en medio de lotes baldíos de la colonia Ferrocarrilera, fundada por extranviarios que trabajaron en la planta impregnadora de durmientes.
“Reforzarán seguridad”
Es el mediodía del miércoles 11 de febrero, 48 horas después de que el encuestador Mauricio fue atacado a balazos.
Es el primer día tras la agresión y los 101 encuestadores de Juchitán volvieron a salir a las calles cargando en la espalda la pequeña mochila de tela que sólo contiene 22 hojas del cuestionario para una familia de seis integrantes, una tabla para que se apoyen, un bolígrafo y un marcatextos que no sirve porque se diluye con el sol.
No traen nada más porque, por la inseguridad que vive Juchitán, el Inegi decidió que aquí el censo se realice sin dispositivos móviles, a bolígrafo y papel.
Tras el ataque armado, el coordinador estatal del Inegi, Jorge López Guzmán, prometió que la seguridad se mejoraría conforme pasen los días: “No podemos dejar a los encuestadores en la indefensión. Estamos organizando que salgan en brigadas de tres a cinco compañeros. Esperamos que las autoridades cumplan”.
101 encuestadores del Inegi trabajan actualmente en la ciudad de Juchitán
La promesa se cumplió sólo esa mañana. Los 101 encuestadores llegaron a la oficina local del Inegi, en la colonia Reforma de esta ciudad zapoteca y dos patrullas los estaban esperando. “Vimos a los policías estatales y al salir nos acompañaron, pero después nos dejaron solos”, lamentan.
A ello se suma que estiran sus viáticos para poder cumplir son su labor: “Entre agua, alguna fritura o comida, gastamos al día unos 120 pesos. El Inegi nos da 500 de apoyo de lunes a viernes. Nosotros trabajamos también sábado y domingo, que son los días que encontramos a las familias que trabajan y en siete días gastamos 840 pesos”, cuentan.
Precauciones, insuficientes
Hace algo de viento o norte, pero el aire es caliente, se aproxima la primavera y el calor invade las calles vacías de la colonia Ferrocarrilera. En medio de esos lotes sin construir, Xhunaxhi Guadalupe y otros encuestadores caminan juntos por la calle, por el miedo a la inseguridad.
“Con tantos asaltos y robos no nos dejan entrar para la entrevista, pero hay familias que nos conocen y nos invitan a comer (...) Juchitán es peligroso, pero es nuestra tierra y aquí estamos”, dicen sin saber que 24 horas después siete de sus compañeros serán asaltados a mano armada. La seguridad aún no llega.
Este viernes, luego que se reportaran los asaltos a encuestadores y tras una reunión entre la Secretaría de Seguridad Pública y el Inegi, Por instrucciones del titular de la SSPO, Ernesto Salcedo Rosales, 15 elementos a bordo de patrullas, se trasladaron a las rancherías López Chente, Juana Pozo, El Polvillo, Xhuvaleza, Guidani, Esquipulas, Paraje Beñee, pertenecientes a Unión Hidalgo, Juchitán de Zaragoza.