Con botargas de policías, combaten la pandemia de Covid-19 en el Istmo

Juchitán de Zaragoza.— En los municipios de Salina Cruz y  Santo Domingo Tehuantepec, en el Istmo, crearon una botarga como parte de una campaña de reforzamiento de medidas contra Covid-19, principalmente para hacer conciencia sobre el uso obligatorio del cubrebocas ante la etapa más crítica de la contingencia sanitaria en la que se encuentra la región.

En Tehuantepec, la botarga en forma de policía municipal lleva el nombre de Guendanabani (vida), como parte de esta campaña de concientización  que realiza la autoridad municipal sobre la pandemia del Covid-19, la cual se llevó a cabo en el centro de la ciudad.

Guendanabani recorrió las principales arterias del centro histórico de esta ciudad del Istmo, entregando cubrebocas desechables a los transeúntes, comensales, comerciantes, y a cualquier persona que al ver en su camino no contaba con éste.

En Salina Cruz el gobierno municipal hizo lo mismo, con otra botarga también con las características de un policía. En su dinámica al recorrer esta ciudad, una comitiva que la acompañaba se mantenía informando a los ciudadanos sobre el uso correcto del cubrebocas, así como de las medidas preventivas de salud para evitar contagios por el nuevo coronavirus. 

Hasta el momento, de acuerdo con el reporte más reciente de los Servicios de Salud de Oaxaca, en el Istmo de Tehuantepec se han reportado 718 casos confirmados de Covid-19 y 96 fallecidos. Esta región y la Cuenca se consideran actualmente “focos rojos” de la pandemia, pues es donde se concentra la mayor demanda de atención médica para pacientes con esa enfermedad.

El Istmo atraviesa una fase de contagios acelerados, en Salina Cruz, por ejemplo, es el segundo municipio en la entidad que más casos nuevos por Covid-19 ha reportado en los últimos tres días, después de la capital; le sigue Santo Domingo Tehuantepec en tercer lugar, y Juchitán en quinto lugar, donde uno de los problemas que enfrenta esta ciudad zapoteca, y que ha documentado EL UNIVERSAL, es que los habitantes no acuden a los hospitales, por desinformación o miedo a no volver a ver su familiar, o no poderlo despedir con sus rituales, por lo que prefieren atenderse en casa, enfrentándose a falta de medicamentos e insumos como oxígeno.