La Cuenca también es productora de sismos; inútil colocación de alertas
Datos históricos del Servicio Sismológico Nacional revelan que en abril del año de 1928 se registró un sismo magnitud 6.7 grados con epicentro en San Juan Bautista Valle Nacional.
Municipios de la región de la Cuenca del Papaloapan, al norte de Oaxaca, han sido epicentros de sismos de magnitudes entre los 6.5 y 7.3 grados, lo que lo hace propenso a hechos similares en cualquier momento, reveló la delegación regional de la Coordinación Estatal de Protección Civil de Oaxaca.
El delegado del organismo en la Cuenca, Jaime Canseco, indicó que datos históricos del Servicio Sismológico Nacional revelan que en abril del año de 1928 se registró un sismo magnitud 6.7 grados con epicentro en San Juan Bautista Valle Nacional.
Nueve años después, en 1937, en Acatlán de Pérez Figueroa ocurrió un temblor de 7.3 grados; la Cuenca volvió a sacudirse en 1948 ante un sismo de 6.5 con epicentro en Santiago Yaveo, así como en agosto de 1973 otro sismo de 7.3, y su lugar de origen fue San Miguel Soyaltepec, entre otros de la región, pero correspondientes al estado de Veracruz.
Pese a esta condición geológica, el delegado regional de la CEPCO señaló que la instalación de alarmas sísmicas como medida de prevención para la ciudadanía ante el registro de un temblor no es viable debido a la proximidad que existiría de un epicentro, pues se sentiría primero el movimiento y después sonaría la alarma.
El coordinador regional indicó que en la Cuenca existen dos sensores de movimientos telúricos que funcionan como mecanismo de auxilio al Sistema de Alerta Sísmica instalado en la capital del estado, el cual ofrece cerca de 28 segundos de ventaja, anticipando un sismo de magnitudes mayores a los 5 grados.
“Mientras más cercano se encuentre el epicentro de los sensores, menor será el tiempo de alerta para la ciudad, por eso no es viable la instalación de alertas en la Cuenca, ni en la Costa de Oaxaca, donde todos los días ocurren sismos y la alerta sonaría al mismo tiempo de que se siente el sismo”, explicó.
La región del Papaloapan, detalló, se encuentra clasificada en la zona C y B, lo que indica que pueden ocurrir sismos de magnitudes considerables y que los sismos que ocurren en la costa de Oaxaca se perciben.