Insisten en que mineras contaminan; hay omisión federal, dicen
Los habitantes y activistas de Ocotlán denunciaron agresiones a las personas que defienden sus territorios
Activistas defensores de la tierra y el territorio denunciaron hoy que persiste “la grave contaminación” en el valle de Ocotlán a causa de la operación de la mina instalada en San José del Progreso.
Las afectaciones van desde la emisión de ruido y polvo excesivo, hasta agresiones a las comunidades y habitantes que han determinado defender sus territorios, como fue el asesinato del líder opositor a la minería Bernardo Vásquez Sánchez, en enero del 2012, señalaron en conferencia de prensa.
"La actividad minera ha generado una descomposición del tejido social, debido a que unos cuantos avalan los proyectos y las gran mayoría los rechaza, generando enfrentamientos entre los propios vecinos" aseguró uno de los integrante del Consejo de Vigilancia de los Ocotes.
Así mismo, indicó que los supuestos beneficios que trae la venta de terrenos a las empresas mineras son efímeros, y las consecuencias lamentablemente son a largo plazo, heredando una baja calidad de vida a las nuevas generaciones ya que la contaminación no sólo es en el aire sino también en los mantos acuíferos.
"En San José del Progreso, ya hay mucha gente con problemas respiratorios, enfermas de la piel, con plomo en su cuerpo y testimonios de mujeres que habían abortado", indicó.
A su vez, autoridades de San Martín de los Canseco manifestaron que no permitirán bajo ninguna circunstancia la entrada de la canadiense Fortuna Silver Mines, pese a que ésta ya realiza trabajos de exploración en los límites ejidatarios, en contubernio con las autoridades federales como Profepa, Semarnat y Conagua, sin respetar la oposición de las comunidades.
Por su parte, Neftalí Reyes Méndez, integrante del Colectivo en Defensa de los Territorios, aseguró que lamentablemente autoridades federales han sido omisas y peor aún cómplices de los daños al ambiente que ha traído consigo la actividad minera y las consecuencias en la salud de los habitantes.
De igual forma el activista señaló que lamentablemente en el caso de la extracción de oro y plata que se realiza en San José del Progreso, el 99 de las ganancias es para la empresa y solo el uno por ciento, traducido en un aproximado de ocho millones de pesos anuales, se destina al erario municipal y federal.
Cabe señalar que en Oaxaca, comunidades como Magdalena Teitipac, Calpulálpam de Méndez, Santo Domingo Zanatepec, Santa María Zaniza, Santiago Laollaga, San Juan Mixtepec, Santa María Zoogochu, Lachatao, entre otras, se encuentran en resistencia ante los proyectos mineros, por lo que exigen la cancelación de las concesiones
En tanto, habitantes de San Martín de los Canseco bloquearon de forma indefinida la carretera federal 175, tramo Ocotlán-Ejutla, para respeten su acuerdo de no permitir la actividad minera en la zona, puesto que lejos de significar progreso en su comunidad, representa grandes riesgos a las salud de sus habitantes.