Trabajadores de vectores en el Istmo toman instalaciones de los Servicios de Salud de Oaxaca
Exigen pasos atrasado y rechazan un descuento salarial para empleados por contrato
Juchitán de Zaragoza.- Integrantes del área de Vectores del Frente Nacional de Trabajadores de la Salud de la República Mexicana (FNTSRM) tomaron este lunes las instalaciones de la Jurisdicción Sanitaria número 2 de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) en Juchitán, para exigir pagos atrasados y rechazar un descuento salarial para los empleados por contrato.
La toma de las instalaciones se dio para cumplir con la amenaza que lanzaron de accionar sus protestas, después de dar 96 horas de plazo al sector Salud de Oaxaca (SSO) para responder a sus demandas.
Elíseo Castro Medina, delegado sindical informó que entre las peticiones también están la exigencia de destitución de los coordinadores que fueron colocados en el puesto por el sindicato, por lo que piden una renovación con la participación de los trabajadores.
La remoción de los dirigentes que exigen, argumentaron, se debe al hostigamiento laboral por parte de los coordinadores.
Además piden que se pague la quincena laborada a los trabajadores por contrato, pues estos apenas tienen vigencia de un mes e incluyen una reducción de salario de hasta 40%; pese a ello, hasta el día de hoy no se les han entregado.
Esta acción de protesta se realiza de manera simultánea con trabajadores de la Jurisdicción Sanitaria 03, con sede en Tuxtepec, y la 06 en la Sierra.
En la capital del estado, trabajadores denunciaron que suman más de 90 las quejas que se han interpuesto contra los titulares de la dependencia, el extitular Donato Casas Escamilla y el recién llegado Juan Carlos Márquez Heine, ante la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO).
En las quejas se argumentan violaciones a sus derechos laborales y discriminación hacia el personal médico y de enfermería; esto último, porque carecen de seguridad social y los pagos de sus salarios son impuntuales.
Ramón Segura, dijo que son 350 los trabajadores agremiados al FNTSRM que enfrentan esta situación en la que cotidianamente se violan sus derechos y sufren discriminación, pese a que no han dejado de laboral durante la pandemia del Covid-19.