Juchitán, Oax. – Unos ocho mil usuarios del sistema de agua potable, que viven en Matías Romero y Santa María Petapa, permanecen sin el servicio de ese líquido desde la noche del sábado 20 de este mes, confirmó el administrador del sistema, Farid de León Franco.
El funcionario explicó que con la crecida del río Malatengo, debido a las fuertes lluvias de los últimos días, el torrente arrastra piedras, lodo, arena, troncos y basura, que impiden el correcto funcionamiento de los equipos de bombeo, instalados en ese cuerpo de agua.
Los equipos agrupados dentro de un cárcamo de bombeo, ubicado dentro del Malatengo, se llenan de lodo y arena que en otras ocasiones han provocado daños a las flechas y chumaceras, y como consecuencia, la suspensión del servicio.
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Para evitar esos daños y proteger los equipos de bombeo y el motor, se tomó la decisión de suspender el servicio del agua potable a los ocho mil 200 usuarios de Matías Romero y de Santa María Petapa, indicó el funcionario.
A través de cinco pipas, la Comisión del Agua y los gobiernos de los municipios de Matías Romero y de Santa María Petapa, se está apoyando a la población, explicó el funcionario, mientras otras familias compran el líquido a particulares.
Mientras Matías Romero no cuente con otra fuente de agua, siempre tendrá el problema de quedarse sin agua, lo mismo en los periodos secos que provocan el estiaje, como ocurrió durante abril y mayo del año pasado, así como cuando llueve, como está ocurriendo ahora.
En años anteriores, recuerdan los habitantes, hubo un proyecto gubernamental para aprovechar el río Ponedero, como nueva fuente de agua potable, construyeron la planta equipada, tendieron la red de tubería e hicieron pruebas desde un tanque elevado. Quedó abandonado.