Juchitán, Oax. – La Confederación de Trabajadores de México (CTM), arreció sus protestas para exigir a la constructora Ingenieros Civiles Asociados (ICA), el pago de más de 50 millones de pesos, por varios servicios para la construcción de la planta coquizadora, en la refinería de Salina Cruz, desde 2022.
El dirigente cetemista en el Istmo, Remigio Manubes, explicó que, además de esa deuda, que impacta negativamente en el comercio y servicios del puerto salinacrucense, la empresa ICA todavía les debe el finiquito a unos cuatro mil trabajadores, hasta de Veracruz y Chiapas. De ellos, mil 700 son de municipios cercanos a Salina Cruz.
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Los directivos de ICA, solo nos dicen que no tienen dinero porque la empresa Petróleos Mexicanos (Pemex), no les ha pagado, pero nuestra gente tiene que comer, comprar útiles escolares y pagar colegiaturas. Contra lo que dicen en los discursos, Salina Cruz, aseguró, está viviendo una situación económica muy dura, sin dinero, añadió el dirigente sindical.
Para presionar a Pemex y le pague, la empresa ICA, indicaron obreros, decidió suspender los trabajos relacionados con la construcción de la planta coquizadora de la refinería “Antonio Dovalí Jaime”, de Salina Cruz, que costará 60 mil millones de pesos y debería entrar en operación desde mediados de este 2025.
La empresa ICA retiró sus grúas de la refinería, pero lo más delicado es que en la Administración del Sistema Portuario Nacional (ASIPONA) de Salina Cruz, la constructora aún no retirado, y debe de pagar por el servicio, equipos de grandes dimensiones que requieren transportes especiales para su traslado.
Mientras ICA presiona a Pemex, la central cetemista también presiona a la constructora resguardando las grúas y otras maquinarias, para evitar, dijo el líder de la CTM, Remigio Manubes, que la constructora se vaya de Salina Cruz, sin pagar el finiquito de los cuatro mil obreros que despidió.