Lluvias dejan sin caminos y agua potable a 4 municipios de la sierra mixe-zapoteca de Oaxaca

Los pobladores dirigieron una carta a la presidenta Claudia Sheinbaum para informar que también la red de agua entubada de sus municipios quedó dañada

Municipios 07/10/2024 15:35 Alberto López Morales / Corresponsal Actualizada 15:35

 

Juchitán. – Pobladores de comunidades que pertenecen a cuatro municipios indígenas de la zona mixe-zapoteca pidieron la intervención de las autoridades estatales y federales, para que reparen los caminos y puentes dañados por las recientes lluvias.

 

En una carta dirigida a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y al gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz (Morena), también informaron que la red de agua entubada de sus municipios quedó dañada por el crecimiento de los ríos, arroyos y aguajes. El agua no está apta para el consumo.

 

Los pobladores de las comunidades que pertenecen a los municipios de Santa María Guienagati, Guevea de Humboldt, Santiago Ixcuintepec y Santiago Lachiguiri, denunciaron que sus caminos de terracería están abandonados desde hace 20 años. No han tenido reparación.

 

En esas localidades, donde viven poco más de 15 mil personas, también exigen que se doten de medicinas e insumos los centros de salud para que puedan ser atendidas las personas enfermas porque con las lluvias no han suministrado los medicamentos.

 

Demandaron además “el levantamiento de un censo integral desde el gobierno, de casa habitación, muebles, equipos electrodomésticos, animales, para obtener datos reales, y cuantificar los daños, sin proselitismo político”.

 

“Exhortamos a los gobiernos para que en coordinación con los presidentes municipales tomen cartas en el asunto y dar prioridad a las necesidades básicas de las diversas afectaciones por las intensas lluvias durante cuatro días”.

 

Desde anoche, por la influencia del huracán “Milton” en la sierra zapoteca-mixe no ha parado de llover, lo que además de daños en los caminos, está provocando el crecimiento del río Las Nutrias, que genera preocupaciones entre las personas que viven en la parte baja de Juchitán.

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