Obra pública, esperanza de IP para que nuevas autoridades del Istmo apuren reactivación económica

Salina Cruz, Tehuantepec y Juchitán son los tres municipios de la región que, si logran la recuperación de su economía mediante la obra pública y compras gubernamentales a favor del comercio local, ayudarán a fortalecer a los otros pueblos del Istmo

Obra pública, esperanza de IP para que nuevas autoridades del Istmo apuren reactivación económica
Foto: Archivo El Universal
Municipios 09/06/2021 09:46 Alberto López Oaxaca Actualizada 09:46

Juchitán.— Golpeados primero por el terremoto de 2017 y después por la pandemia, y con poco más de 200 mil habitantes, tres municipios urbanos del Istmo comparten necesidades apremiantes, como la urgente recuperación económica, pero también otras carencias que deberían atender  las próximas autoridades. 

Salina Cruz, Tehuantepec y Juchitán son los tres municipios de la región que, si logran la recuperación de su economía mediante la obra pública y compras gubernamentales a favor del comercio local, ayudarán a fortalecer a los otros pueblos del Istmo que comercialmente están vinculados a esos núcleos urbanos, consideran empresarios de la construcción y comerciantes.

Los empresarios de la construcción, por ejemplo, exigen que el gobierno estatal deje de favorecer a firmas foráneas y piden que las compras se concentren en el comercio regional. De otra forma, la recuperación económica seguirá postergándose, aseguran.

En el puerto de Salina Cruz, explica el empresario de la construcción Ricardo Zamora, hay tres prioridades: la primera, añade, tiene que ver con la recuperación de la economía. “Las autoridades de los tres niveles de gobierno deben apoyar a las empresas locales y no a las foráneas. ¿Cómo?, que compren los insumos con los comercios del municipio y, en el caso de grandes obras, que subcontraten a las compañías locales”, responde.

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De acuerdo con información de la página de la Administración Portuaria Integral de Salina Cruz (Apisal), en esa ciudad el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador construye desde hace un año la escollera oeste que costará unos 5 mil millones de pesos.

“En obras de esa magnitud, los constructores locales quizá no podamos concursar, pero sí estamos en condiciones de participar en el acarreo de piedras, de personal y de ser subcontratados”, dice.

Hace un año, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu)  difundió que en su Programa de Mejoramiento Urbano (PMU), para reactivar la economía mexicana, incluyó a varios municipios del Istmo, entre ellos a  Salina Cruz, para invertir  200 millones de pesos y ejecutar obras como el malecón, el sueño de los porteños, y espacios deportivos, así como parques.

 

Recuperación económica, urgente

 

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Foto: Archivo EL UNIVERSAL

 

En  Juchitán, señalan por separado los empresarios Juan González Davar y Juan Gilberto Prado, la necesidad primordial es también la recuperación de la economía. 

“Las próximas autoridades tendrán la obligación de aplicar políticas públicas que estimulen la inversión municipal hacia las empresas locales, porque de esa forma se propiciará la derrama económica que beneficiará a toda la sociedad”.

Juchitán, igual que Salina Cruz, Tehuantepec, Santa María Mixtequilla, El Espinal, Ciudad Ixtepec, Asunción Ixtaltepec, Matías Romero, El Barrio de La Soledad y San Juan Guichicovi, también recibió  recursos del PMU que le permitirán  recuperar la economía, generar empleo y derrama económica. 

“Queremos que las próximas autoridades municipales propicien que esas inversiones ayuden a las empresas locales”, piden los empresarios.

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De acuerdo con la postura del representante de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) en el Istmo, Abimael Olivera, una de las necesidades más grandes que enfrentan las poblaciones son las obras públicas, pues sin ellas  “no habrá empleos ni  tampoco derramas económicas. Sin obras, no habrá recuperación”, advierte.

“En Juchitán aún tenemos el pendiente de la reconstrucción de edificios,  como el palacio municipal y viviendas  dañadas por el terremoto ”, dice el delegado de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), Juan Gilberto Prado.

 Mientras que González Davar  destaca también que  se  necesita   resolver el drenaje colapsado, “pero el gobierno federal autorizó mil 200 millones de pesos para atenderlo”, señala el empresario, quien espera  que las nuevas autoridades fortalezcan la obra pública.

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