La construcción de esa obra, que comenzó en abril de 2020 y que se espera quede concluida a fines de este 2023 con una inversión de poco más de 4 mil millones de pesos, lleva retrasos significativos por los problemas que han surgido con el acarreo de piedras.
La CATEM es dueña del contrato del acarreo del material pétreo, pero por bloqueos al acceso a la obra ha compartido el acarreo con otros sindicatos como la CTM, CATEM y Libertad; sin embargo, las protestas han retrasado los trabajos de la escollera que apenas lleva un avance físico de 50%.
De acuerdo con el proyecto ejecutivo de la Administración Portuaria Integral de Salina Cruz (AP}ISAL), la escollera de mil 600 metros de largo y 120 metros de ancho, requerirá de 11 millones d toneladas de material pétreo.
La obra, que forma parte del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), y que facilitará la llegada de buques petroleros y mercantes de gran calado al puerto de Salina Cruz, ha enfrentado protestas de pescadores, salineros y ostioneros, afectados con la construcción.