La retención de los 10 hombres ocurrió el pasado 2 de septiembre, luego de que fueron citados por autoridades agrarias de San Pedro Ozumacín, cabecera ejidal a la que pertenecen, donde fueron señalados de cumplir acuerdos de asamblea, no realizar tequios y otras faltas.
Tras estos hechos, la Segego informó que el día de ayer, luego de una protesta de pobladores realizada en la ciudad de Oaxaca para solicitar la intervención estatal, se realizó una mesa de diálogo entre pobladores de ambas comunidades en las oficinas de dicha dependencia.
La Segego afirmó que se está dando seguimiento al conflicto, aunque se trata de un tema que no le compete ni puede atender, pues es del ámbito federal. “Es un conflicto social interno, entre Santiago Progreso y Ozumacín. La mesa que tuvimos se rompió porque no quisieron acordar absolutamente nada”.
A través de su área de comunicación social, la Segego señaló que se busca conciliar ambas partes, pero ambas comunidades exigen que el diálogo se lleve a cabo en su población y ninguna de las partes cede. “Hay dos propuestas, que sea en Tuxtepec, para que ambas comunidades puedan llegar ahí, o en Valle Nacional”, señaló.
“Los retenidos siguen, están en buenas condiciones, están recibiendo alimentos y no hay tortura”, dijo la vocería de Segego.
Ayer, pobladores de Santiago Progreso informaron que se presentó una denuncia por los delitos de secuestro y retención ilegal de la liberta, pero pese a ello no habían sido liberados, por lo que solicitaron la intervención de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO).
También, dijo que solicitó la intervención de diversas autoridades para “resguardar la integridad física de las personas retenidas y para que por medio del diálogo busquen la resolución del conflicto”.