“Siempre nos inundamos, pero ahora fue peor”, narran en Niltepec, pueblo de Oaxaca afectado por lluvias
Cazadero Arriba, junto con colonias de Ixhuatán son parte de las comunidades del Istmo de Tehuantepec que reportaron inundaciones; autoridades alertan por crecida de ríos
Juchitán.– En cuestión de segundos, el agua ingresó a sus casas, se llevó a sus gallinas, mojó sábanas, colchones y tiró mesas y sillas de madera.
“Aquí, cada vez que llueve, siempre nos inundamos, pero ahora fue peor”, relatan.
Son los pobladores de la comunidad de Cazadero Arriba, que pertenece al municipio de Santiago Niltepec, a la entrada de la zona oriente del Istmo, quienes, molestos, denunciaron que las autoridades nunca limpiaron los desagües donde pasan los arroyos.
“Todos los pollitos que apenas había comprado la familia se los llevó la corriente del agua de la lluvia”, relató doña Crisálida, quien comentó que tuvo la fortuna de salvar a sus mascotas antes de que el agua terminara de inundar su vivienda.
Antes de la media noche, explicó doña Liliana Sesma, “estaba la lluvia muy fuerte, pero después se calmó y nos fuimos a dormir, pero como dos horas después, escuchamos como que corría el agua y entonces vimos que nos estábamos inundando”.
Como pudo, dijo, levantó lo que alcanzó, agarró la escoba para sacar el agua de la casa y comenzó a levantar la ropa de la familia. “Siempre que llueve, el arroyo se llena de agua, pero ahora las lluvias sí estuvieron muy fuertes y nos inundó”, lamentó.
Un vecino de Cazadero Arriba, Enrique Cruz, comentó que cuando despertó, luego de un par de horas de estar pendiente de la lluvia, se percató que el agua había entrado a su casa. Todo el patio estaba cubierto por el agua de la lluvia, explicó.
Cazadero Arriba, junto con algunas colonias de San Francisco Ixhuatán son parte de las comunidades del Istmo de Tehuantepec que reportaron inundaciones tras las fuertes lluvias que han golpeado a Oaxaca en las últimas horas, y ante lo cual autoridades de Protección Civil de la región alertan a la población, sobre todo por la crecida de los afluentes de distintos ríos, como el Ostuta, el Espíritu Santo, el Tehuantepec y Las Nutrias.
