Tormentas eléctricas dejan sin agua a 8 mil viviendas de Matías Romero, en el Istmo de Oaxaca
Desde el 26 de agosto pasado el sistema de bombeo de la línea 2 dejó de funcionar. El equipo se dañó por las variaciones de voltaje, derivado de las tormentas eléctricas
Juchitán. -Las tormentas eléctricas averiaron los sistemas de bombeo de agua entubada a unas 8 mil viviendas en el municipio de Matías Romero, en la zona norte del Istmo de Tehuantepec.
El administrador del sistema de agua, que depende de la Comisión Estatal del Agua (CEA), Guillermo Lavariega Cárdenas, confirmó que desde el 26 de agosto pasado el sistema de bombeo de la línea 2 dejó de funcionar.
Dicha línea abastece de agua a poco más de 3 mil usuarios que viven en las colonias El Roble Sur, Oriente y Poniente, así como a Llanito y a La Oaxaqueña. El equipo se dañó por las variaciones de voltaje, derivado de las tormentas eléctricas, explicó.
A partir de hoy, informó Lavariega Cárdenas, la línea 1 que surte a la otra mitad de los usuarios quedó fuera de actividad, porque el equipo de bombeo también resintió daños, pero por la tarde se reparó y empezó a surtir el agua. “Ya son equipos de hace muchos años”, justificó.
Por su parte, el representante del Comité Pro Agua de Matías Romero, Manuel Robles, anunció que los usuarios afectados por la falta de agua desde hace 17 días, definirán qué acciones adoptarán para exigir el restablecimiento del servicio del agua.
Las familias, añadió, han estado comprando el agua. Matías Romero es un municipio que siempre ha resentido el problema del agua, debido a que el sistema carece de pozos profundos; es mediante cárcamos que se bombea el agua directamente del río Malatengo.
Cuando es tiempo de sequía, el río se seca y cuando es periodo de lluvias, como ahora, surten agua sucia o lodosa, por lo que las familias compran el agua a particulares.
“En coordinación con el gobierno municipal, hemos apoyado a las familias con una pipa de agua y estimamos que, en unos días más, la línea 2 funcione. La bomba ya se instaló, solo falta que nos entreguen el motor”, dijo el administrador Lavariega Cárdenas.
