Este miércoles, Oaxaca se convirtió en el primer estado del país en legislar en contra de la venta directa de “alimentos chatarra” a menores de edad, una iniciativa que busca atender la “epidemia de obesidad” que vive la infancia en México.
Entonces, el funcionario explicó que es necesario que se tenga una buena alimentación para hacer frente a dicha enfermedad, y se fortalezca la salud de los mexicanos.
“¿Para qué necesitamos el veneno embotellado, el de los refrescos? ¿Para qué necesitamos donas, pastelitos, papitas que traen alimentación tóxica y contaminación ambiental? Las botellas llegan a ríos y luego al mar”, advirtió en aquella fecha.
Y aseguró que “si no nos hubiéramos dejado engañar por los estilos de vida que vienen en la televisión”, la salud de los mexicanos sería distinta.
A partir de esta reforma de Ley en Oaxaca, el subsecretario de Salud destacó que ésta “coincide con una de las prioridades de la agenda del gobierno federal, que es la promoción de una sana alimentación".

Un estudio del Centro de Investigación en Nutrición y Salud, del Instituto Nacional de Salud Pública, advirtió que niños con consumo habitual de bebidas azucaradas tuvieron 2.4 veces más probabilidad de tener sobrepeso.
Así también, que el consumo elevado de bebidas azucaradas en niños y adolescentes predice ganancia de peso en la edad adulta, y que el consumo de bebidas azucaradas y refrescos se ha identificado como un factor de riesgo importante para diabetes mellitus 2 y síndrome metabólico.
Al respecto, el gobierno de México ha expuesto que las enfermedades crónico-degenerativas como la obesidad, la diabetes y la hipertensión, son la causa principal de que la tasa de letalidad por Covid-19 en el país sea tan elevada, y que esas enfermedades devienen de la mala alimentación, de manera destacada por el alto consumo de bebidas azucaradas y alimentos industrializados de alto contenido calórico, los llamados “alimentos chatarra”.
En ese sentido, la propuesta de Ley que hoy se aprobó para prohibir la venta de alimentos y bebidas con alto contenido calórico a menores de edad, fue respaldada también por organismos internacionales como el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés), la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) y otras 73 organizaciones nacionales y estatales.