Feria de lenguas indígenas llega al Cenart
El estado de Oaxaca con sus 15 lenguas indígenas es el invitado de honor
El escritor Juan Gregorio Regino, director general del Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI), anunció hoy que la segunda Feria de las Lenguas Indígenas Nacionales (Flin) se llevará a cabo del 9 al 12 de agosto en el Centro Nacional de las Artes (Cenart).
Son 21 millones de mexicanos los que se definen como indígenas, es decir, uno de cada cinco.
Ellos son personas que con esfuerzo, dedicación, trabajo y estudio, han superado estereotipos, prácticas segregacionistas, y sobre todo, la discriminación que ancestralmente han sufrido quienes forman parte de las etnias nacionales, explicó en conferencia el funcionario.
Consecuentemente, señaló, “ese debe ser un tema que ocupe al Estado mexicano, para que las lenguas originales del país trasciendan a toda la sociedad; nuestro esfuerzo es por una política lingüística nacional, no solamente indígena, es decir, desde lo tradicional e individual hasta lo moderno y nacional”, advirtió el poeta galardonado por su obra.
En contraparte, informó, hay indígenas en todo el país que niegan su origen por temor a ser discriminados socialmente. En ese sentido, dejó ver que la feria se enmarca en el Día Mundial de las Lenguas Indígenas, que desde el 23 de diciembre de 1994 se celebra cada 9 de agosto con la finalidad de reconocer y preservar sus prácticas culturales.
La feria incluirá 85 actividades con escritores, editores, y diversos actores de la cadena productiva del libro en lenguas indígenas, además de teatro, tecnología, música, poesía, talleres para niños, arte popular y otras manifestaciones artísticas y culturales, como la presencia de algunas cocineras tradicionales con sus muestras gastronómicas.
En México hay 68 lenguas de origen indígena, señaló el poeta, y aunque la feria es una plataforma incipiente, ha hallado solidaridad de la sociedad civil.
Subrayó que no se trata de un proyecto de los pueblos indígenas, sino de una actividad carácter nacional, y que México no es monolingüe “pero la hegemonía del español ha mermado sus lenguas”.
La feria, por lo tanto, tiene entre sus metas abrir mercados para la producción editorial independiente, proyectos autogestivos, e iniciativas que desde la sociedad indígena o no, puedan abrir mercados. La idea es visibilizar esas iniciativas con los servicios de traducción, doblaje, interpretación y lenguajes digitales que el INALI puede ofrecer.
“México presume de ser una nación moderna, pero ser monolingüe es sinónimo de atraso. Los tratados internacionales son pactados en español”, anotó, para enseguida decir que “hay que consolidar el uso de las lenguas indígenas en sus propias sociedades y enseñar a los niños desde la primaria que desde su lengua materna pueden hacer arte y ciencia”.
Crear condiciones para que las lenguas originarias se introduzcan en el imaginario nacional es el reto del Estado Mexicano y del INALI en particular, reconoció, por eso la institución genera propuestas como esta feria, para que los indígenas las conserven y los no indígenas las adopten y respeten, las valoren y las vean como algo muy propio.
La Flin busca insertarse en el circuito de las ferias del libro en el país, con la finalidad de fomentar la lectura en lenguas originarias en la sociedad nacional, y al mismo tiempo, ofrecer un escaparate a los escritores que llevan a cabo su obra en esas lenguas.