"Quizá el director de Laguna Verde tenga que tener un salario de tres veces el del Presidente, porque hay tres personajes en el mundo con ese perfil", ejemplificó la panista.
A ello, la titular de la SFP respondió que "es el Estado y su nueva ética pública que estamos construyendo entre todos, el Estado con sus poderes, el que debe definir los criterios básicos de la justicia social, en este caso de los salarios y los ingresos y los honorarios, que reflejarán la justicia social, no el mercado".
Dijo que "así como desde el poder Ejecutivo estamos invitando a los otros poderes a analizar y sumarse a una política de austeridad republicana, también tendríamos que invitar al mercado a sumarse a esos mismos salarios. Esto no quiere decir poner en riesgo, ni meternos en la discusión de las ganancias".
Planteó que "nadie dice que no haya derecho a que en un sistema de mercado, un sistema capitalista, las ganancias bajen o se mermen".
"Pero los salarios del mercado, los ingresos del mercado quizá sí se tendrían que ajustar. No tenemos por qué brincar desde el Estado, los funcionarios, senadores y los jueces y magistrados a llegar a los salarios del mercado", agregó.
Más bien, dijo, "los salarios, los honorarios y los ingresos del mercado tendrían que ajustarse a una nueva moralidad y a una nueva ética pública de salarios justos en todo sentido, no mediocres, no mermados, no reducidos, pero justos".
"Caminemos juntos para que, tanto los recursos públicos se entreguen al desarrollo y las ganancias privadas también se entreguen a las inversiones, al desarrollo", propuso.
“Estamos hablando de poner en el centro, la ética pública, de mejorar la democracia", apuntó.
ed