Daniel Garza, Fernando Osorio, Mathieu Janelle y Daniel Galindo, cuatro profesionistas, ahorraron cuatro años para cumplir un sueño que después se convertiría en un reto: llegar hasta Rusia en autobús.
Aseguraron que sus familias siempre los apoyaron e inclusive recibieron cooperación de amistades. Afirmaron que ya cuentan con su fan ID, su visado temporal y los permisos en la Unión Europea para mover a La Bendición, como llamaron su medio de transporte. Para los juegos de la Selección Mexicana se turnarán quién entra al estadio.
Según dijeron, se usó poco y está en perfecto estado. Entre los jóvenes comenzaron a adaptarlo, siempre con las características de un camión tradicional de ruta como las estampitas de la Virgen, peluches o el libro vaquero en la cabina. Mientras que por fuera lleva el colorido mexicano como un altar de muertos, mariachis, las tradicionales plazas y hasta un puesto de tacos.
De hecho, las ciudades a las que arribarán vienen pintadas en el autobús, como si fueran las paradas de cualquier camión de ruta de una ciudad.
Por dentro es una casa rodante con cuatro literas y una televisión. Tienen conectado un Nintendo, un sofá cama, tiene seis sillones y una mesa de trabajo.
Encima del camión, donde porta la leyenda “Canta y no llores” y los colores de la bandera naciona, tiene adaptada una plataforma multiusos.
Los viajeros explicaron que no tienen un trayecto fijo y sólo saben que tienen que estar en Moscú para el juego inaugural. El viaje está programado para que dure de 25 a 45 días.