Toledo ve, se conmueve y crea

Los caparazones de las tortugas son algunos de los primeros materiales de la naturaleza que Francisco Toledo recuerda que le conmovieron por su belleza. También las jícaras, dice el artista a quien el Museo Nacional de Culturas Populares dedica una exposición que contiene 600 piezas, creadas por él o hechas en espacios que él ha generado, cuyos diseños tienen en común la referencia a la naturaleza o el uso de materiales que provienen de ella.

El modelo de una fuente en madera; el tapiz de un gato dedicado a Carlos Monsiváis; papalotes en papel donde aparece un chango, un elefante, un pulpo, un pez o un gato; collares y aretes con figuras de cangrejos, peces y chapulines; lámparas que combinan geometría y naturaleza; gorros de lana con detalles de otros animales; rejas con las formas de insectos y flores.

Son diseños, objetos, artesanías, obras de arte en vidrio, cuero, lana, hilos, cochinilla, metal y papel de muchas épocas de trabajo de Francisco Toledo.

“Es un trabajo de muchos años atrás -explicó el artista en conversación telefónica-. Los diseños de papalotes, de cuadernos, de abanicos de papel, desde que se inauguró el taller de papel que va para veintitantos años; se empezó a buscar cómo financiarlos, invitamos a otros artistas a producir diseños para papalotes. Sobre todo (fue ver) cómo darle trabajo a la gente, en qué ocuparla”.

Toledo contó que en muchos casos se buscó generar una producción en el taller de CaSa, en la comunidad de San Agustín Etla: “Ese le da trabajo al que corta, se compra la piel (cuero de cabra), se dora; hay un pequeño tallercito donde se producen esas joyas”.

Otras piezas que están en la muestra son los diseños hechos a partir de la reutilización de radiografías.

Hay una pequeña fuente de madera, una maqueta: “Hace no sé cuántos años el arquitecto (Ricardo) Legorreta, me pidió que hiciera una fuente; me invitaron a una feria en Alemania. Se me ocurrió hacer esta greca de Mitlay que se mezclara el agua con cochinilla para dar un color, que el agua tiñera la piedra, creo que era mármol; esa pieza fue a Alemania. Al regreso, hicimos la misma pieza, pero en madera, en el Centro Cultural Santo Domingo. Decidimos hacer modelos chicos para venderlos y ayudar a las instituciones”.

Al preguntarle por la relación con la naturaleza, Toledo expresó: “Hay objetos como las conchas de tortuga que son muy bellos, las jícaras que son frutos; las conchas de tortuga se usan de juguete y también de instrumento musical. Todo eso me ha llamado la atención. El diseño en el caso de las tortugas me parece perfecto, en todo”.

Acerca de cómo se hicieron estas piezas, expresó: "Es un juego, en ese juego se utilizan ciertas formas, con las conchas de tortuga se puede armar una torre porque embonan. Muchos artistas tomamos de otros, nos vamos alimentando de unos y de otros. En las artesanías es lo mismo y he aprendido mucho en Teotitlán del Valle".

Más de 600 piezas del artista integran la exposición “Toledo Ve”. Son artículos de la vida cotidiana, bocetos, prototipos, modelos, objetos intervenidos, obras múltiples y piezas únicas.

Toledo trabaja el metal, el barro, el papel, el vidrio, la madera, el cuero, el textil y otros elementos de la tierra para crear objetos que hermanan la utilidad con la belleza, que se pueden ver y tocar, que se usan y admiran.

La muestra es resultado de una colaboración entre la Secretaría de Cultura federal, la Dirección General de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas, y el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO).

El Museo Nacional de Culturas Populares se ubica en Avenida Hidalgo 289 en la colonia Del Carmen, Alcaldía de Coyoacán, y tiene un horario de martes a domingo de 10 a 20 horas. El costo de entrada al público es de 15 pesos.